Director: Henry Kümel --- Intérpretes Principales: John Karlen, Delphine Seyrig (1, 2, 3, 4), Danielle Ouimet, Andrea Rau, Paul Esser, Georges Janin, Joris Collet, Fons Rademakers ---
En el plano técnico tiene sus mejores mimbres, con una exquisita y elegante puesta en escena, preciosa fotografía a toda pantalla y una tenue y envolvente banda sonora. Todo ello de calidad contrastada. Otra cosa es su guión. Y es que este no digo que no resulte esforzado. Está escrito entre cuatro personas lo que indica que hubo trabajo, pero quizás por ello el resultado final sea de no convincente por cuanto a mi se me antoja que peca de demasiado ambiciosa, quedándose al final en un logro parcial. Y es que el ritmo es lento, a veces, sobre todo por la mitad, las escenas quedan como excesivamente alargadas, aunque necesarias para que vayamos viendo la seducción de los dos personajes femeninos a la pareja protagonista.
Lo mejor, sin duda, es el tercio final, con una excelente escena, la de la ducha y el enterramiento de un cadáver, rodado con sentido de la tensión y suspense. El final, como no podía ser de otra manera, abierto. Sí, la considero interesante, con un agradecido punto de morbosidad, refinado erotismo y melancolía existencial, pero al final se me queda una sensación de que podría haber sido mejor. Y es que, sobre todo debido al romo ritmo se me ha hecho bastante larga, cuando por metraje no lo es tanto.