El tal Téllez, que gestiona (¿?) nada menos que Hacienda y Participación en el consistorio badalonés. El no entender que somos libros porque obedecemos las leyes. También aquellas que no nos gustan. El no entender, en fin, nada de nada. Este es el fruto de años de pedagogía nacionalista en el desprecio a la ley. Espero que su provocación no quede sin respuesta. Dentro de la ley, por supuesto, pero en un Estado democrático los desafíos no han de obtener la callada por respuesta