Pasemos pués a analizar el primer partido, ante los Minnesotta Timberwolves. Ante nuestro público y sin el reencuentro de Garnett con su ex-equipo nos costó afrontar el encuentro. La victoria contra Toronto había elevado la moral a la plantilla, más con el regreso de Rajon Rondo, a pesar de su discreta actuación ante los canadienses.
Comenzamos dormidos, con los T-Wolves domimando y siendo Paul Pierce el único que parecía dispuesto a plantar cara. El primer cuarto dejaba paso a un presagio de desastre evidente, pero los Celtics se mentalizaron rápidamente y de la mano de Rondo (16 asistencas) repartiendo juego y de Paul Pierce (23 puntos) siendo la referencia ofensiva logramos afianzarnos en el marcador y llegar hasta el último cuartos con total igualdad en el marcador.
Von Wafer (10 puntos) sorprendió a todos dando un empujón al equipo en tan sólo 15 minutos de acción. Glen Davis, con 17 tantos, volvería a ser el de siempre, un jugón de 2 metros pero con una gran entrega. Además de Ray Allen que anotó 20 puntos y cerró el partido evitando una bandeja de Luke Ridnour a falta de escasos segundos para el final del encuentro colocándole un tapón impresionante.
Así pues, segunda victoria consecutiva, por (96-93) , la 26ª de la temporada y el retorno de la sensación de que este equipo tiene un gran potencial, el mayor de la liga. No obstante, la verdadera prueba de fuego llegaría esta noche ante los San Antonio Spurs. La noche de Reyes quedaría marcada por la gran actuación de Rajon Rondo en particular.
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San Antonio Spurs @ Boston Celtics
Noche de Reyes, la crisis parece notarse, al menos en mi hogar, esperaré a las rebajas. En Boston gran noche también, los tejanos visitan el TD Garden como líderes la liga. Las viejas glorias de San Antonio han decidido volver a la carga un año más, y es impar. Cierto es que Tim Ducan ya no es el mismo, pero sigue siendo un garantía en todos los sentidos y uno de los mejores interiores de la NBA. Manu Ginobili está viviendo su mejor momento deportivo y a Tony Parker parece haberle ido bien el separarse de Eva Longoria.
En los Celtics una noche más Glen Davis inicia el encuentro junto a los ya habituales. Su aportación esta noche va a ser vital con 23 puntos. Rajon Rondo volvió a fascinar a toda la liga. Sus 22 asistencias, 10 rebotes, 12 puntos y 5 robos de balón al tercer partido de su regreso han sido portada en más de algún periódico fuera de los Estados Unidos.
Pero nada de ello habrá valido la pena sin la aportación también de Paul Pierce (18 puntos y 7 rebotes) y de Ray Allen con 31 puntos y un gran (13/16) en tiros de campo aunque enmudeciendo al Garden con dos tiros libres fallados que a punto estuvieron de voltear el resultado en favor de los de Poppovich.
La gran aportación que realizó todo el equipo, volcándose por lograr el dominio en el rebote valió la pena. Los 36 balones capturados y el acierto desde el triple (55%) propiciaron que no se notase en exceso el lamentable porcentaje de tiros libres (53,3%) . Los Spurs, muy regulares en todos sus porcentajes y con un 94% de acierto desde la línea de personal dejaron lanzar a los Celtics en algunas ocasiones cómodamente, lo que facilitó las cosas a los verdes, que acabaron con un 61% en TC.
En resumen, partido muy igualado pero con todo el quinteto titular volcado de lleno en luchar por la victoria y seguir dando miedo. En San Antonio aún se estarán preguntando que ha ocurrido, como ha sido posible, pero es que tenemos un equipazo. No obstante, sigue habiendo deberes para Doc Rivers.
El banquillo, segunda y tercera unidad, no ha sabido dar ese paso adelante que han dado el resto. Al menos, ha servido que no han bajado sus prestaciones, pero jugadores como Nate Robinson o Jermaine O´Neal deberían no estancarse y comenzar a mostrar nuevas cosas. Sin embargo, parece pronto aún para empezar a recriminarles cosas. Nate viene de jugar bastante bien cómo titular sustituyendo a Rondo y Jermaine aún está adaptándose tras su lesión.
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