Durante siete temporadas y un revival, Rory Gilmore se la pasó leyendo todo lo que tenía en mano. Hoy me pongo un poco en su lugar y les traigo algunas recomendaciones…
Debo reconocer públicamente mi adicción por Gilmore Girls. Dentro de la serie, se habla mucho de elementos de la cultura popular estadounidense; pero uno de ellos sobresale en Rory Gilmore: la fascinación por la lectura.
Para quienes no sepan de qué estoy hablando, Gilmore Girls es una serie que cuenta la relación madre-hija entre Lorelai y Rory. Lorelai tuvo a Rory a los 16 años y le inculcó todo lo que ella creía que era importante para la vida: café, comida chatarra, películas, música y libros. Rory no sólo sigue fervientemente todas estas enseñanzas, sino que invita a que otros la sigan.
The Rory Gilmore Reading Challenge.
Hay alguien más fanático/a que yo que anotó cada uno de los libros que ella leyó en el Rory Gilmore Reading Challenge: una lista para saber cuántos de los 339 libros leíste vos también. Hoy elegí algunos de los que leí (aunque sería interesante leerlos todos). Creo que deberían formar parte de nosotros/as por su temática, belleza… o para conocer acerca del mundo.
Historias reales: algunos libros que todos/as deberíamos leer
Si bien recomiendo todos los que están en la lista, hay algunos de ellos que son historias reales o semi-reales. El primero que tiene que estar en nuestra biblioteca (o en nuestro haber de lector/a) es El Diario de Ana Frank. Cuando me tocó analizar cada una de sus páginas a pedido de la escuela, recuerdo haber vuelto del colegio y abrazado fuerte a todos sin que entendieran. Porque Ana Frank me hizo agradecer la familia que tenía, la época en la que había nacido, todo. Por esto creo que debería ser de lectura obligatoria, para que leyendo sobre una de las historias más horribles de la humanidad aprendamos a no repetirla.
Para continuar, hay una semi-biografía que deberíamos contemplar: La campana de cristal de Sylvia Plath. La autora cambia los nombres de personas y lugares, pero el relato de su novela es profundamente real. Como punto positivo, a Sylvia no se le escapa nada: descripciones, sensaciones, pensamientos… Todo está descripto de una manera muy interesante.
«Me sentía muy tranquila y muy vacía, como debe sentirse el ojo de un tornado que se mueve con ruido sordo en medio del estrépito circundante»
La adolescencia y el paso a la juventud, tratada como Sylvia, te da la sensación de que está escribiendo sobre vos, sobre tus sensaciones, tus pensamientos y la manera en que podés observar el mundo desconocido —y conocido a la vez—. Eso sí, es una novela para leer en el tiempo, es decir, con sus momentos de reflexión. Porque Sylvia no disfraza nada, no suaviza nada… Así que si solo querés entretenerte y no pensar en nada, no está tan buena.
El camino de Proust
Si digo Marcel Proust, digo En busca del tiempo perdido. Si digo En busca del tiempo perdido, digo 3000 páginas, 1300000 palabras y 7 volúmenes. Yo vengo a recomendar la primera parte de este imposible, si se quiere, libro: Por el camino de Swann.
Citando a Mark Twain, la obra de Proust es “un libro que muchos alaban y quisieran haber leído, pero que pocos leen en realidad”. Tal vez espanta un poco la longitud de sus volúmenes, pero sin dudas un/a buen/a lector/a que se precie de tal, tiene que leer a Proust en su vida. Yo me aventuré hace unos años y logré leer seis de los siete tomos en un momento en que tenía muchísimo tiempo libre. Por esto recomiendo, no sólo el ocio, sino también momentos de soledad y capacidad de asombrarse por la belleza de la tristeza. Es que a través de su camino, Proust expresa de cierta manera toda la sensibilidad con la que cuenta. Plasma en cada una de sus frases el miedo, la tristeza, la fragilidad ante el mundo que lo rodea, que lo abruma y que le duele en muchas ocasiones.
Lo único que te pido es que no te des por vencido/a. Cada uno de los tomos merece que te sientes con un cafecito a disfrutarlo, como si tuvieras una cita con Proust.
Uno bien obligatorio para los tiempos que corren…
Un ensayo éxito de ventas, un testamento para las mujeres de este siglo, un manifiesto feminista. Todo esto es El Segundo Sexo de Simone de Beauvoir. A través del recorrido que idea Simone, se muestra la intención de desentrañar el “ser mujer” y tratar de explicarlo lo mejor posible. Con su frase, quizás, más conocida “Uno no nace mujer: se llega a serlo”, revoluciona la época y las que vienen.
En estos tiempos que corren (¡La revolución será feminista!), es necesario volver a Simone. Es necesario observar cómo se derriban mitos, cómo se hizo la historia. Asombra observar cómo un libro de hace más de cincuenta años tiene vigencia e importancia en la formación hacia el feminismo.
Vas a ver muchos más libros en el Rory Gilmore Reading Challenge. Vas a encontrar algunos que se adapten a tu interés de lector/a, algunos que no te atraigan en lo más mínimo. Pero, lo más importante de todo y cualquiera sea tu elección, es que nunca dejemos de leer. Pensá que tenemos la oportunidad de vivir en el mundo que queramos, rodeados/as de los personajes que amemos y viviendo, a través de las líneas, las historias que anhelamos. ¿Quién más tiene esa suerte, además del/de la lector/a?