Pero se les ocurrió ir a La isla de las tentaciones y la cosa se torció. Ella le puso los cuernos a Pablo y Rosito pagó los platos rotos. Se pelearon por su custodia y Pablo amenazó con quemarlo ante dos de las solteras que, lejos de disuadirlo, le animaban a que se deshiciera del osito para castigar a su pareja.
Esto hizo reaccionar a los espectadores, que llenaron las redes sociales de memes, empleando el hashtag #prayforRosito impulsado por aquellos que disfrutan viendo como se rompe una pareja, pero no soportaban que un oso de peluche sufriera.
Fue torturado, violado, colgado de una lámpara y vejado por las tentadoras para finalmente, ser arrojado por Pablo y morir en la hoguera delante de Mayka para que ella pudiera ver cómo ardía.
Hay quien dice que sobrevivió, que simplemente cayó inconsciente y más tarde fue revivido. El Ministerio del Interior se llevó su cuerpo y tras curarlo, le dio una nueva identidad y hoy en día se gana la vida de Policía Nacional, dando palizas a personas sin hogar y poniendo multas por no llevar mascarillas.
Otros dicen que Pablo quemó a otro en su lugar y que viven juntos desde entonces. Pero lo más probable es que murió en aquella hoguera y hoy en día ni Pablo ni Telecinco han pagado por su muerte.