La receta original pedía 7 huevos para 500 gr. de harina, yo he hecho la mitad de la receta por lo que debia poner 3 huevos y medio, como necesitaba 1 clara para la cobertura he puesto 3 huevos enteros mas 1 yema para hacer las rosquillas y la clara que me sobra la he utilizado para la cobertura.
Que he utilizado (para 18-20 unidades):
Para las rosquillas:
3 huevos
1 yema
250 gr. de harina
75 gr. de aceite de oliva
1 cucharada de azúcar
1 cucharada de licor de anís
Para la cobertura:
1 clara de huevo
pizca de sal
60 gr. de azúcar
1 cucharada de agua
1 cucharada de licor de anís
Como lo he hecho:
He puesto en un bol amplio los huevos, la yema y el azúcar y lo he batido ligeramente con un batidor manual. Le he añadido el aceite y el anís y he vuelto a batir para integrarlos. He añadido la harina poco a poco y la he ido integrando amasando con las manos, en un principio dentro del bol y luego sobre la encimera enharinada hasta obtener una masa suave y homogénea algo pegajosa.
He limpiado la encimera de trabajo y la he barnizado con un poco de aceite de oliva. He ido cogiendo porciones de masa de unos 25-30 gr. y las he ido rodando en la encimera sobre el aceite hasta formar tiras cilíndricas de unos 25 cm. He unido los extremos para formar la rosquilla y las he ido colocando en una bandeja de horno forrada con papel de hornear. Las he horneado a 165º C durante 20-25 minutos, hasta que han comenzado a dorarse. Las he sacado del horno y las he dejado enfriar sobre una rejilla.
Para la cobertura, he puesto a fuego medio un cazo con el azúcar y el agua para hacer un jarabe, sin remover dejar que hierva durante 1 minuto.
Mientras he batido la clara con una pizca de sal a punto de nieve y le he añadido el anís Cuando se ha hecho el jarabe he ido incorporando en forma de hilo y sin dejar de batir el jarabe sobre la clara montada. He continuado batiendo hasta que se ha formado un merengue espeso que forma picos duros y al tocar el recipiente ya no esta caliente.
He bañado la cara superior de las rosquillas con el merengue y las he dejado secar.
Y este es el resultado:
Bueninisimas, para chuparse los dedos.