El juego, una suerte de locura plataformera con toques de acción y gráficos pixelados inspirados en clásicos de 8 y 16 bits videoconsoleros (aunque sin renunciar a algunos efectos contemporáneos), cuanta con la baza a su favor de la originalidad en su desarrollo, y es que en este caso el juego comenzará justo cuando vencemos al jefe final y perdemos la memoria, iniciándose una aventura en sentido contrario, recorriendo de nuevo los niveles (aunque nosotros como jugadores no lo hayamos hecho aún claro), y descubriendo quiénes somos y qué narices hacemos en este castillo.
Muy pronto os podremos ofrecer unas impresiones de primera mano con el juego para contaros que nos ha parecido este nuevo esfuerzo patrio en la consola de Nintendo.
Visita la página oficial de Roving Rogue para más info