Escudo protector frente al cáncer La rúcula forma parte de la misma familia que las coles y, como el resto de sus parientes, destaca por su elevado aporte en vitamina C y sustancias con un demostrado efecto preventivo frente al cáncer del ovario, mama y próstata.
Fuente de hierro y ácido fólico Ya sea sola o combinada con una mezcla de hojas de lechuga, berros, acerola, col lombarda, etc., se consigue una ensalada muy rica en ácido fólico. Esta vitamina ayuda a prevenir importantes malformaciones congénitas en el feto. Debido a su contenido en hierro, de más fácil asimilación que el de otros vegetales, reduce el riesgo de sufrir anemia gestacional.
Cuida la linea No solo es un vegetal ligero, sino también depurativo y laxante. Gracias a su contenido de vitamina B6, también ayuda a controlar la ansiedad y el decaimiento, algo frecuente entre las personas que están a dieta.
Muy versátil en la cocina Su intenso sabor amargo y picante contrasta muy bien con todo tipo de quesos -en especial, los azules- y con alimentos de sabor dulzón -tomates confitados, vinagretas con miel...-. En Italia se utilizan en crudo para coronar las pizzas y algunas recetas de pasta.
EL DATO. Las personas con bajo rendimiento de tiroides no deberían comer rúcula cruda en exceso.