Esto se produce en medio de tensiones crecientes después de que hombres armados se apoderaran del edificio del Parlamento y de la sede del gobierno regional en la región de Ucrania meridional de Crimea, e izaran banderas rusas.
También se ha reportado que el depuesto presidente ucraniano, Viktor Yanukovych, ha sido visto en un hotel de lujo de cinco estrellas a las afueras de Moscú.
Insistiendo en que sigue siendo el presidente, el Sr. Yanukovich está buscando una garantía para su seguridad frente a las acciones de los "extremistas".
El allanamiento sorpresa en la capital de Crimea de Simferopol vio como hasta 50 hombres armados con uniforme de combate tomaban al asalto los edificios oficiales, erguían barricadas, y colocaban letreros que decían 'Crimea es rusa'.
También se informa que visten cintas negras y anaranjadas, un símbolo ruso de la victoria en la Segunda Guerra Mundial.
El presidente interino de Ucrania, Oleksandr Turchinov ha hecho un llamamiento a la calma, y ha tachado a los asaltantes armados de "criminales con uniforme militar".
También instó a las fuerzas rusas a no dejar su base en el sur de Crimea, advirtiendo que "sería considerada una agresión militar".
El Ministro del Interior interino de Ucrania Arsen Avakov dijo que las fuerzas de seguridad habían sido puestas en estado de alerta en Simferopol y han acordonado los edificios "para evitar un derramamiento de sangre".
Hay crecientes señales de separatismo en la región, que tiene fuertes lazos con Moscú, y donde la mayoría de la población habla ruso.
El miércoles hubo un enfrentamiento entre separatistas pro-rusos y los tártaros étnicos, que apoyan a los nuevos líderes de Ucrania, en las afueras del edificio del parlamento.
Rusia ha puesto en duda la legitimidad de las nuevas autoridades ucranianas, y se ha comprometido a defender los derechos de sus "compatriotas".
Va a reaccionar "sin concesiones", si éstos fueron violados, dijo el Ministerio de Exteriores en un comunicado.
El presidente Vladimir Putin ha puesto al ejército en estado de alerta para unos ejercicios militares, así como medidas para reforzar la seguridad en la sede de la Flota rusa del Mar Negro en Crimea.
La medida provocó una reprimenda del Secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, quien advirtió a Rusia en contra de cualquier intervención militar en Ucrania.
Haciendo hincapié en que la crisis de Ucrania no debe considerarse en un contexto de Guerra Fría, dijo: "Quiero destacar a todo el mundo que esto no es Rocky 4. No es un juego de suma cero."
El Secretario General de la OTAN Anders Fogh Rasmussen también ha dicho que estaba preocupado por la evolución de Crimea en Ucrania, e instó a Rusia a no hacer nada que desate "una escalada de tensión o cree malentendidos".
Llegó al tiempo que Rusia confirmaba que tomará parte en las conversaciones sobre un paquete financiero del Fondo Monetario Internacional (FMI), para Ucrania, donde la situación económica sigue empeorando después de meses de disturbios.
La deuda de Ucrania ha batido un record y necesitará $35 mil millones (21 billones de euros) en los próximos dos años para evitar la quiebra.
La Comisión Europea dice que Rusia debe ser incluida en los esfuerzos para proporcionar asistencia financiera.
Rusia ha advertido en contra de cualquier intervención militar en Ucrania
Ucrania también ha visto la continua devaluación de su moneda en medio de la agitación política, que llevó a la caída de Yanukóvich.
Él ahora es un fugitivo, buscado en relación con la muerte de unas 100 personas durante la reciente violencia.
Se espera que el nuevo gobierno de Ucrania sea aprobado formalmente por el Parlamento el jueves, y se enfrenta a la muy compleja tarea de restaurar la estabilidad en el país.
Fuente: Sky News