RUTA a BRAÑAGALLONES desde BEZANES, Caso

Por Pasuapasu

PR-AS 66: Ruta a Brañagallones.

Brañagallones es una vega de origen glaciar, donde antes se asentaba un pequeño lago a una altitud de 1.240 m. Hoy en día este tranquilo lugar, es el asiento de varias cabañas, un refugio de cazadores, hoy transformado en refugio para senderistas, y donde el abundante ganado pasta libremente.
La ruta que hoy publicamos es la más sencilla y común para acceder a este lugar privilegiado del Parque Natural de Redes, aunque no la única. Otra vía conocida es la que proviene de la zona del Puerto San Isidro por la Pista Wamba y la Peña del Viento, que hicimos hace unos años. Alrededor de Brañagallones tenemos variedad de opciones para disfrutar de caminatas y naturaleza. Subir al Canto del Oso, acceder a la Peña del Vientu, ir a la Vega Pociellu, o simplemente caminar por los bosques que rodean esta zona, nos dejarán siempre con un agradable sabor de boca.

Datos Técnicos de la Ruta:

  • Inicio: Bezanes, Caso. Para llegar a este lugar desde Oviedo, puedes consultar el siguiente itinerario.
  • Aparcamiento: Hay un amplio aparcamiento.
  • Fecha de realización: Julio 2018
  • Tipo de ruta: Circular I/V
  • Tiempo total:  Aproximadamente 7 horas y 15 min. (se incluyen las paradas)
  • Altura máxima: 1.240 m. (Brañagallones)
  • Altura mínima: 650 m. (Bezanes)
  • Desnivel acumulado: Unos 775 m. aproximadamente.
  • Pendiente media: Sobre un 7.3%
  • Distancia recorrida: Aproximadamente 21 Kms
  • Recorrido seguido: Bezanes - Mirador del Texu la Oracion - Túnel del Crestón - Brañagallones - Túnel del Crestón - Mirador del Texu la Oración - Bezanes
  • A tener en cuenta: Se trata de un recorrido largo.
  • Otras rutas por la zona: Rutas por el Concejo de Caso - Acceso desde la Pista Wamba
  • Track de la ruta:  

Datos M.I.D.E. de la Ruta: 

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Fotos de la Ruta:

La ruta que nos llevará a Brañagallones desde Bezanes es una pista de unos 10.2 kms de longitud y casi en constante ascenso, aunque hay algún pequeño llano e incluso ligero descenso. El camino en su mayor parte es de tierra, salvo algún punto con más pendiente donde se hormigonó. Actualmente, hay un servicio de taxis 4x4 que pueden llevar a la vega a todo aquel que le resulte imposible subir andando, o simplemente no le apetezca.
Desde el aparcamiento de Bezanes salimos cruzando el pueblo en busca de una pista que nace a la izquierda, y que sube zigzagueando la ladera en busca del primer punto de pasada de la ruta, el Mirador del Texu la Oración.






Ya estamos en el Mirador del Texu la Oración. Sólo llevamos 2.5 kms y ya superamos 300 metros de desnivel. Desde este mirador tenemos una guapa vista del valle por el que desciende el Río Monasterio y por el que nuestro camino sigue el trayecto unos cuantos metros por encima.

Desde el mirador, podemos tener una buena vista del Cantu del Oso y la Peña del Vientu en la zona de San Isidro.

Seguimos ganando altura para después perder unos escasos metros, que nos servirán de recuperación en la larga subida.

En una zona de bosque, tenemos una agradable fuente para reponer agua y descansar a la sombra unos minutos.


La pista vuelve a seguir ganando metros, aunque ya de una forma menos intensa. Se va abriendo también el valle, dejándonos buenas vistas de las montañas que rodean la zona.

Cruzamos bajo una visera protectora de aludes, en la zona del Argayo del Lobo.

Atravesamos la Sierra de Pries para pasar a su cara occidental, donde el valle se encaja algo más y el corte del terreno por nuestra derecha se hace mucho más pronunciado. Tenemos a la vista el Túnel del Crestón, antesala de la llegada a Brañagallones.

Justo a la entrada de Brañagallones, encontramos una nueva fuente.

Y ya tenemos a la vista la amplia campera de Brañagallones, salpicada de atendidas cabañas y ganado pastando tranquilamente.


Nos acercamos al refugio a tomarnos algo y comer. Aún nos resta por bajar los 10.2 kms de vuelta por el mismo camino. Para nosotros fue una bajada infernal, ya que en el tiempo que estuvimos en el refugio se  montó una tormenta que no nos abandonó en todo el descenso, llegando al coche empapados hasta los huesos. Curiosamente en la anterior visita a Brañagallones desde la zona de San Isidro nos pasó lo mismo, por lo que parece que Brañagallones para nosotros, es asegurarse una mojadura, incluso en verano, pero la daremos por buena. Fin a una nueva ruta rodeada de naturaleza por el Concejo de Caso.