RUTA COSTERA POR COAÑA - De Foxos a Torbás

Por Losdelasclaras

 RUTA COSTERA POR COAÑA 

 

Seguimos completando poco a poco el objetivo de recorrer la costa asturiana.  En esta ocasión nos trasladamos al concejo de Coaña.

El recorrido me ha encantado en especial el Faro de San Agustín, el precioso y poco conocido Puerto del Ribeiro y la Playa de Torbás con sus dos cascadas.

Haremos un recorrido siguiendo lo más posible la línea de costa partiendo desde la Playa de Foxas en la desembocadura del Río Navia hasta la preciosa playa de Torbás. La vuelta la haremos por el interior pisando algo más de asfalto del que nos gustaría.

Durante el recorrido haremos gran parte del PR-AS 296: Ruta Marinera de Coaña visitando el precioso pueblo pesquero de Ortigueira y el no menos guapo Faro de San Agustín.

DATOS DEL RECORRIDO

  • Inicio y fin del recorrido:  Playa de Foxos (Coaña)
  • Fecha de realización de la ruta: Enero 2022
  • Tiempo total:    5 Horas (incluidas pequeñas paradas)
  • Distancia total:  17  kilómetros
  • Desnivel acumulado de subida y bajada:  330 metros
  • Época recomendada: Todo el año
  • ¿Recomendable para niños?:  SI
  • Dificultad del recorrido: Fácil
  • TRACK  DISPONIBLE: Pedidlo por email a losdelasclaras@gmail.com

PLANO DEL RECORRIDO

Dejamos el vehículo en el amplio aparcamiento de la playa de Foxos, situado junto a la desembocadura del Navia.

Una estrecha línea de escollera limita el encuentro de la playa con la ría de Navia.


Estamos un rato disfrutando de esta playa de Foxos que nos pareció más guapa de lo que esperábamos al estar al lado de un espigón.

Ascendemos el tramo de carretera que une la playa de Foxos con el pueblo homónimo y sin llegar a este nos desviamos a la derecha para dirigirnos a la playa de Arnielles


El acceso al arenal con forma de concha exige descender por una escalinata con decenas de peldaños. Una vez abajo la cruzamos en su totalidad para ascender por su extremo occidental, junto a la desembocadura del arroyo

Acometemos el ascenso por una empinada escalera.


Vemos la bonita playa de Arnielles desde un fantástico mirador


Continuamos por un bonito paseo pegado al mar y que nos llevará a las proximidades del Faro San Agustín.

Inaugurado en 1975, es uno de los faros más modernos de la costa cantábrica.
Artículo original / Original post: http://photoxperiences.blogspot.com/2012/10/no-es-un-faro-cualquiera-es-el-faro-de.html
© photoxperiences
Inaugurado en 1975, es uno de los faros más modernos de la costa cantábrica.
Artículo original / Original post: http://photoxperiences.blogspot.com/2012/10/no-es-un-faro-cualquiera-es-el-faro-de.html
© photoxperiences
El faro de San Agustín inaugurado en 1975 es uno de los faros más modernos de la costa cantábrica.
La primera edificación que vemos era la casa de los prácticos  y patrones.

No está habitado, careciendo de vivienda anexa. Asentado sobre una base circular donde se asienta la sala de máquinas, presenta un diseño bonito y original con una torre cilíndrica de 20 metros de altura pintada con bandas horizontales blancas y negras.


En las inmediaciones del faro encontramos un monumento en memoria de los pescadores de la localidad que han perdido la vida en naufragios.


Vemos una pequeña edificación a su lado (izquierda en la foto) que era la antigua baliza de destellos  construida en el año 1945.  Sobre su torre se encontraba una linterna de acetileno que se encendía de forma automática.

En el extremo encontramos una campana de hierro fundido que servía de advertencia a los barcos en días de niebla.  Desde este punto tenemos una vista espectacular.

Nos adentramos unos metros hacia el interior para ver la  Ermita de San Agustín, fundada en el siglo XVII por el gremio de pescadores pertenecientes al puerto de Ortiguera.

En sus tiempos se celebraban en la ermita misas para los pescadores para así agradecer que no se había sufrido ningún percance al regresar a casa tras la pesca. Desde su creación se han llevado a cabo varias remodelaciones hasta obtener la ermita amplia que es a día de hoy.  Durante la celebración de El Carmen el 16 de julio la tradición manda bajar la imagen de la Virgen desde la ermita de San Agustín hasta la Rula (en el puerto), donde descansa una noche.

La ruta continúa por la calle principal del pueblo, Donde contemplaremos varias casonas de indiano.

La primera esta de Villa Arbosa Tras su abandono ha habido varias propuestas de restauración, pero de momento ninguna ha fructificado como se puede apreciar en las fotos.

Pasamos junto a  uno de los edificios de arquitectura indiana más representativos del municipio de Coaña, la Quinta Jardón.

En 1889 como residencia veraniega. Del edificio lo más destacado es la torre central a la que se le aumentaron dos alturas, ya que originariamente era más baja y desde donde se puede observar el puerto de Ortiguera.

 La tercera que vemos es esta“Casa Cancio”, otra construcción de estilo americano. Casa Cancio se convirtió con los años en un restaurante para grandes eventos, con un añadido en la parte posterior poco afortunado. El negocio cerró hace un tiempo.


En este punto denominado barrio de “La Cruz” se toma el conocido como “Camín del Penedón” que da acceso a la zona del puerto. 


Alcanzamos el Puerto del Ribeiro: Su tradición pesquera se remonta varias generaciones atrás, donde la pesca de langostas y a la caza de ballenas se practicó durante varios siglos.

Situado en la desembocadura del Arroyo de Fundiyón cuya incisión y desembocadura dan origen al escueto puerto y al barrio que escalona sus casas siguiendo el sentido de la pendiente.


Me ha sorprendido mucho este puerto de Ortiguera, para mí sin duda es uno de los más espectaculares de toda Asturias, y uno de los menos conocidos del gran público. 

 Estrecho y encañonado, llama la atención por su belleza natural, con su pequeño espigón, sus aguas cristalinas de fondos rocosos, y los enormes paredones de piedra, teñidos de verde vegetación, que lo hacen angosto y único.


Puerto de refugio siempre precario, Ortiguera creció con lo justo, con la ocupación de una pequeña entalladura cantábrica, El Ribeiro, abierta al fuerte mar del Norte entre punta Corbeirón y el cabo San Agustín. Minúscula cala donde refugiar, varándolas sobre el pedrero, las lanchas de unos pescadores cuyas casas brotan del cantil sobre las pendientes abarrancadas del arroyo Fundiyón.

El puerto de Ortiguera, que actualmente es de hormigón, fue realzado en tres ocasiones, la primera de ellas entre 1918 y 1923. Hasta aquel entonces, los pescadores amarraban sobre la desembocadura del Fundiyón -conocida como El Ribeiro- donde las mujeres les esperaban con cestos.

La ruta prosigue de nuevo subiendo por el barrio de “El Ribeiro” hasta el barrio de “La Cabana” donde se encuentra un mirador con espléndidas vistas al mar Cantábrico.

Esta P.R. finaliza en el enlace con la Senda Costera E-9 que da comienzo unos metros más adelante, en el tramo Ortiguera-Viavélez.  Por él seguimos atravesando una zona de praderías muy cercanas al mar.

Cuando el GR E-9 se dirige al interior a la localidad de Medal, nosotros nos desviamos a la derecha para seguir por praderías pegadas a la línea de costa


Nos arrimamos a los acantilados y vemos al este de nuestra posicion la Punta Campaña,  debajo se encuentra una escondida playa casi inaccesible La Isla


Vemos también el llamativo Islón que separa las dos escondidas playas: La Isla a su derecha y La Marella a la izquierda (aún más escondida) He visto un acceso bastante expuesto que desciende a estos pedreros y que imagino que será usado por pescadores, no obstante lo vi algo delicado para bajar


Volvemos al interior para enlazar nuevamente con el E-9 a la altura de la población de Medás.  Aquí tomamos una carreterina que nos desciende hasta las proximidades de la playa de La Figueira.


El descenso a la playa se hace por una empinada escalera que da acceso a esta estrecha playa protegida por verticales acantilados.

 
Retomamos al GR que toma una pista que desciende hasta el arroyo Pinto, cuyo curso remontaremos unos cientos de metros.


Atravesamos un pequeño bosque de ribera, algo que se agradece en esta zona castigada por las plantaciones de eucalipto.


Cruzamos el río por este puente de madera y ascendemos nuevamente a la rasa a la entrada de la localidad de Lloza.
Junto a este bonito cabazo vemos la indicación de la Playa de Torbas hacia la que nos dirigimos.


Pasamos junto a la ermita de San Salvador.

Una carreterina asfaltada nos lleva hasta las proximidades de la playa de Torbás.  Una ensenada de más de un kilómetro de longitud. Como estaba la pleamar no pudimos recorrerla hacia su lado oriental.

Así que nos vamos para su extremo oeste. Torbas es una playa paradisíaca donde reina la tranquilidad, es buen lugar para la pesca, y buceo.



Dos riachuelos vierten sus aguas a esta playa y en épocas de caudal podemos ver como sus aguas caen al arenal a modo de cascadas. A los pocos metros encontramos la primera.

Seguimos avanzando totalmente solos y disfrutando de esta espectacular playa.


Alcanzamos la segunda de las cascadas situada debajo del antiguo Molín de Carbueiro.


Una auténtica preciosidad...


Dejamos atrás Torbás y seguimos ahora por una pista que asciende desde el aparcamiento de la playa en dirección a Cartavio.
Pero nos toca regresar a recoger nuestro vehículo y tenemos bastantes kilómetros por delante, así que abandonamos el GR 9 que se dirige a Cartavio y tomamos otra pista hasta el caserío de Lugarnuevo, aquí tomamos la carretera CÑ -6.  Pasamos por Lloza y Medal, disfrutando de un paseo tranquilo por estos parajes de la rasa costera y viendo alguna joya como este tractor Barreiros r440 seguramente de finales de los 60 o principios de los 70


Nos acercamos ya que nos queda casi de paso al poco conocido Castro de Mohías. En 1940 empezaron las excavaciones de este asentamiento prerromano erigido sobre la meseta, donde han ido apareciendo hasta 20 construcciones y diversas obras de cerámica. Su ocupación se extendió hasta el siglo II d. C. y en 2014 fue nombrado Bien de Interés Cultural.

Continuamos por la población de Mohias donde pasamos junto a este vemos el Palacio de Santa Cruz del siglo XVI; este palacio, con planta en forma de U, recuerda a los pazos gallegos. Está en muy buen estado. Posee torre, almenas y tres vistosos escudos. Durante un tiempo se alojó en él el ilustrado Gaspar Melchor de Jovellanos, cuya habitación perdura, así como el retrato de su hermano Francisco de Paula y un buen archivo.

Desde el palacio continuamos por la estrecha carretera que atraviesa la pequeña población de Foxos y continúa en descenso hasta alcanzar la Playa Foxos donde tenemos el vehículo.