Ruta de Beatricia en Alcalá: (XI)

Por Majelola @majelola

Foto: MiPaco


"Con las manos crispadas sobre la mesa y la barbilla hundida en el pecho, llorando en silencio y sin aspavientos, le parecía la persona más desgraciada del mundo. Compadeció a su madre como nunca lo había hecho. 
―Cambiaré. 
―¿Quieres ayuda? 
―Eres lo único que me queda. Haré lo que quieras. 
―Lo que quiero es que hagas un viaje. 
―¿Un viaje? 
La miró confusa. Una propuesta de esa clase era lo último que esperaba oír. ...
Una semana después, a finales de julio, una atractiva mujer de mediana edad irrumpía en la plaza del Palacio Arzobispal tirando de una pequeña maleta. Siempre le había gustado aquella plaza, era recoleta a pesar de su tamaño, y a ciertas horas, cuando estaba poco frecuentada, desprendía murmullos luminosos de otro tiempo, de esos lugares fugaces que solo viven en el recuerdo. Sumergió la mano en la quieta fuente, y su reflejo tembló hasta borrarse. En el agua apareció un borrón negro y anaranjado. Levantó la vista. 
―¿Es usted Merilio? 
―¿Con mi aspecto podría no serlo? 
―En absoluto. 
―Permítame ―dijo el caballero haciéndose con la maleta y ofreciendo gentil su otro brazo. 
―Si me concede el honor. 
Marcela se felicitó en secreto, no esperaba un guía tan guapo y cortés. Él mostró una sonrisa amigable que ella acomodó a sus expectativas. “Tendré que averiguar si es soltero”."
Beatricia (Mariaje López) M.A.R. Editor