Miradores del Navia: Circular desde el Área Recreativa de Castrillón, Boal
Ruta exquisitamente señalizada y mantenida, que según nos informó un vecino, se debe a la aportación privada de los vecinos de la zona y el apoyo económico de una empresa eléctrica.
Datos Técnicos de la Ruta:
- Inicio: Área Recreativa del Puente de Castrillón, Boal. Para llegar a este lugar desde Oviedo, puedes consultar el siguiente itinerario.
- Aparcamiento: Hay un pequeño aparcamiento en la entrada del Área Recreativa.
- Fecha de realización: Febrero 2018
- Tipo de ruta: Circular
- Tiempo total: Aproximadamente 4 horas y 45 min (incluidas paradas y no menos de media hora refugiados de la lluvia en Doiras)
- Altura máxima: 300 m. (Silvón)
- Altura mínima: 35 m. (Puente de Castrillón)
- Desnivel acumulado: Unos 525 m. aproximadamente.
- Pendiente media: Sobre un 9.5%
- Distancia recorrida: Aproximadamente 11.5 Kms
- Recorrido seguido: Área Recreativa del Puente de Castrillón - El Rebollal - Silvón - Embalse de Doiras - Doiras - Piñeira - Área Recreativa del Puente de Castrillón
- A tener en cuenta: Nada en especial.
- Track de la ruta:
Datos M.I.D.E. de la Ruta:
Fotos de la Ruta:
La ruta la iniciamos en el Área Recreativa de Castrillón, aunque podría iniciarse también en el Embalse de Doiras. Siguiendo el sentido recomendado en los carteles informativos de la zona, cruzaremos el Puente de Castrillón. Tras unos metros de asfalto, saldremos por el camino que nos llevará al pueblo de El Rebollal, que según nos contaron posteriormente, en la actualidad está deshabitado.Con unos metros de altura ganados, ya empezamos a ver los oscuros meandros del Río Navia.
Plácidamente llegamos a El Rebollal, primera localidad por la que transitaremos en esta ruta. Parece ser que actualmente no vive nadie en este solitario pueblo, al que se accede por una pista. Hasta aquí la lluvia nos respetó, pero poco duraría la sequía, a pesar del cielo azul que se deja ver en parte de la siguiente foto.
Salimos de El Rebollal por un cómodo camino que sigue ganando metros en su mayor parte del recorrido, para salir al pueblo de Silvón, punto más alto del recorrido de hoy.
Tras una corto chaparrón, el día vuelve a abrir y nos deja a nuestra derecha Doiras, lugar por el que pasaremos en un rato.
Cruzamos Silvón y llegamos a la Ermita de San Juan. Aquí abandonamos el camino por el que subimos desde El Rebollal, para tomar un pequeño sendero que sale a la derecha de la Ermita. Este camino nos bajará entre pastizales hasta el mismo Embalse de Doiras.
El Embalse de Doiras, es una de las presas que hay en la parte alta del Navia y con un salto de unos 90 metros. Junto al Embalse de Arbón y el de Salime, son los principales de esta zona.
Tras superar el embalse, nos vamos por un pequeño sendero que nos llevará a Doiras, la localidad más grande del recorrido de hoy.
El sendero rápidamente nos saca a esta localidad. Podemos ver una edificación donde residían los trabajadores de la central antes de que todo estuviese automatizado, y a la que accedían por el mismo camino por el que nosotros llegamos.
Doiras deja detalles que demuestran su importancia como motor económico de la zona en un tiempo no tan lejano. Uno de ellos son las antiguas escuelas tan peculiares de la época. Hoy, tras una reforma, parecen destinadas a usos lúdicos por parte de los vecinos.
En Doiras la lluvia nos pilló ya de completo. Estuvimos atechados en una parada del bus no menos de media hora esperando a ver si paraba, pero no fue el día. Con agua, seguimos camino en dirección a Piñeira. Unos metros iniciales por asfalto para tomar un desvío a la derecha y abandonar ya definitivamente esta bonita localidad.
Por el camino, pasamos pegados al Palacio de Verdín, casona con patio y corredor del siglo XVIII.
Subimos unos metros por una pequeña carretera entre eucaliptos, desviándonos a la derecha.
En la siguiente imagen aparece el único lugar que requiere estar un poco atentos. La línea de torres de tensión, dan la impresión de llevarnos entre ellas, pero la señalización nos saca a la izquierda para bajar ya directos a Piñeira, última población por la que transitaremos.
Llegamos a Piñeira. Continuamos la ruta subiendo unos metros hasta la carretera, pero en vez de seguir por el asfalto, un nuevo sendero de tierra nos bajará ya de forma definitiva, al punto de partida de la ruta de hoy.
Empieza probablemente la parte más guapa de la ruta. El descenso al Puente de Castrillón atraviesa un precioso bosque con alguna edificación abandonada, dejando a nuestra izquierda el Río Roxíos, que desemboca en nuestro destino final.
Ya tenemos a tiro de piedra el Puente de Castrillón, donde pondremos punto y final a esta vistosa e interesante ruta.
El Área Recreativa de Castrillón, es uno de esos lugares a los que hay que ir al menos una vez. Es simplemente increíble. El oscuro y tranquilo Río Navia, unido a la vegetación, embarcadero y desembocadura del Río Roxíos, dejan una estampa difícil de igualar.