Ruud van Nistelrooy cuelga las botas.
Hoy en día, quedan pocos caballeros de verdad. Si además, tratamos de buscarlos en el mundo del fútbol, la tarea se vuelve harto complicada, si no imposible.
Van Nistelrooy ha sido uno de los más grandes delanteros de la historia. Sus números no dicen lo contrario. Quizá si las lesiones le hubieran dado más tregua, hoy estaríamos hablando del, posiblemente, mejor nueve que ha dado Holanda. A pesar de todo, no anda muy lejos de van Basten.
VanGol dejó el fútbol de forma oficial acompañado de su familia, algunos compañeros (Maresca, Weligton, Camacho, Baptista...) y escoltado por Fernando Hierro, Antonio Fernández y Francisco Martín Aguilar. Lo hizo con un discurso digno de su persona:
"Buenos días. Gracias por venir a la prensa, a mi familia y a mis compañeros. Ayer jugué mi último partido como profesional. Mi gran sueño era jugar la Champions con el Málaga y que cumpliésemos el sueño, pero para mí ha llegado el momento del adiós. Jugar al máximo nivel me obliga a reconocer que he llegado a mi límite físico. No podía ser mejor para mí despedirme de esta manera, estoy feliz, sobre todo de que yo haya podido tomar esa decisión. Quiero dar la gracias al Málaga, a mis compañeros, a los técnicos, a los fiscos, a Antonio Fernández (director deportivo), a Fernando Hierro, a mi afición por un año inolvidable. Estoy orgulloso de haber ganado títulos colectivos e individuales gracias a mis compañeros. Pero para mí la satisfacción más grande fue el trabajo que hice año tras año, preparándome para llegar al nivel más alto posible. Gracias a la afición de Den Bosch, Heerenveen, PSV, Manchester, Real Madrid, Hamburgo y Málaga. A los aficionados de la selección holandesa y a todos mis fan personales. Gracias a mi madre, que siempre ha estado ahí. Siempre creyó en mi sueño e hizo todo lo posible por que lo cumpliese. Gracias a mis hermanos, a mi padre. Gracias a su trabajo pudimos crecer como crecimos en la familia. Gracias a mi mujer, llevo 17 años con ella y es la base de mi éxito. En todos los sitios me sentí en casa gracias a ti. Quiero empezar otra etapa de mi vida contigo... Gracias a todos".
El holandés, comenzó sus andanzas en el balompie en el FC Den Bosch, equipo de la segunda holandesa. De ahí pasó al PSV. Corría el año 1998 y por entonces, su entrenador era Bobby Robson. Dio el salto al Manchester United, donde comenzó a hacerse hueco entre los mejores delanteros del panorama mundial. De ahí, pasó al Real Madrid. Luego, tras un año en el Hamburgo SV, recaló en el Málaga, donde cuelga las botas dejando al equipo clasificado para la Champions League y habiendo anotado 4 goles en Liga en esta última temporada.