Sábado, 13 de Abril de 1940

Por Sila
NARVIK: Con las primeras horas del día, comienza la Segunda Batalla Naval de Narvik. La escuadra británica, comandada por el Vice-Almirante William Withworth, es mucho mayor que la que hace dos días se enfrentó a los alemanes: la componen el acorazado HMS Warspite, el portaaviones HMS Furious y los destructores HMS Bedouin, Cossack, Punjabi, Eskimo, Kimberly, Hero, Icarus, Forester y Foxhound. Por su parte, los alemanes únicamente cuentan para defender al Kampfgruppe 1 con ocho destructores y dos submarinos, dirigidos por el Capitán de Fragata Erich Bey. Justo al iniciarse el enfrentamiento, un biplano Swordfish lanzado desde el Warspite consigue hundir al submarino U-64; ocho marineros germanos mueren y otros 38 son rescatados por los ingleses. El U-64 hace historia al convertirse en el primer submarino de la guerra y de la historia en ser hundido por un avión. Utilizando la superior capacidad artillera del HMS Warspite, los ingleses consiguen destruir a los destructores Dieter von Roeder, Erich Koellner y Herman Kunne. El submarino que había sobrevivido y los destructores consiguen disparar varias andanadas de torpedos contra los británicos, pero los ingenios son defectuosos y ninguno explota. A las 14:15, la formación alemana había quedado rota, y los británicos lo aprovechan. Los destructores Cossack y Foxhound hunden al destructor Bruno, mientras que el Eskimo, el Forester y el Hero acosan y destruyen al Georg Thiele. Aislados, los dos destructores alemanes supervivientes, el Bern von Armin y el Hans Lüdemann, son abandonados por su tripulación, barrenados y hundidos. La Segunda Batalla Naval de Narvik ha terminado con la práctica destrucción del Kampfgruppe 1.
El destructor alemán Herman Kunne en llamas y hundiéndose
El saldo final es de ocho destructores y un submarino perdidos por los alemanes, con 128 muertos y 67 heridos. Los ingleses solo sufren daños menores en tres destructores y pierden a 28 hombres y otros 55 quedan heridos. Pero más que el número de barcos hundidos, lo realmente importante de esta batalla y de la anterior del pasado día 11 es que Narvik y los 2.000 soldados alemanes del general Dietl ha quedado aislada. La Kriegsmarine ha sufrido a lo largo de Weserübung y de los días inmediatamente posteriores bajas mucho mayores de lo esperado, lo que supone un duro golpe a la moral de la armada pese a que la operación terrestre ha sido un auténtico éxito. A partir de ahora, los buques alemanes no participarán en la Campaña Noruega, lo que abre las puertas a la esperada y previsible contraofensiva aliada.
El Bernd von Armin tras ser abandonado por su tripulación
NORUEGA: Prosiguen los avances alemanes desde Oslo en dirección a Trondheim, aunque los combates son de mucha menor intensidad a los de ayer. En el noroeste toman Eidwoll y en el oeste Dramman, sin que en ningún punto se encuentren los germanos con resistencia a gran escala, únicamente escaramuzas. Elverum, la ciudad en la que se ha instalado el rey Haakon VII y su gobierno sufre un importante ataque aéreo alemán durante casi tres horas durante la mañana. También la localidad de Frederickstad, al norte de Oslo y donde tropas noruegas de la 1ª División se están tratando de reorganizar, es bombardeada por la Luftwaffe; a última hora del día los alemanes llegan a dicha localidad. Desde el aire, la RAF vuelve a bombardear el aeródromo de Stavanger, en poder alemán, y lanza minas sobre las aguas noruegas y danesas. Precisamente cerca de Stavanger, el submarino U-34 hunde al viejo minador noruego Froya (595 tn.), que defendía la fortaleza de Agdenes. El ataque tiene lugar a las 18:54 y los 78 tripulantes noruegos salen indemnes.
FRENTE OCCIDENTAL: Fracasa un intento alemán por ocupar, al este de Mulhouse, una isla sobre el Rin defendida por los franceses.