El general al mando de la Sickleforce, el general Pager, pide, desesperado, a Londres que le sean enviados refuerzos, suministros y artillería, y señala que su situación es insostenible. Algo más al norte, la Mauriceforce del general Deviant tampoco está mucho mejor: cercados en Namsos, son sometidos a constantes ataques aéreos por la Luftwaffe. Únicamente parece que en Narvik los aliados son capaces de mantenerse, y únicamente gracias a que los alemanes están cercados y han optado por una estrategia defensiva. La Operación Hammer, iniciada el pasado día 18 para recuperar el centro de Noruega, ha fracasado rotundamente. El Alto Mando Británico decide que la situación es insostenible y comienza a preparar planes para evacuar a sus fuerzas en el centro y el sur de Noruega.
BERLÍN: Con la mejora del tiempo atmosférico y con la Campaña Noruega por fin encauzada, Hitler decide retomar su plan para invadir Francia. En una reunión del OKW, el Führer informa que Fall Gelb comenzará durante la primera quincena de Mayo; la fecha exacta será establecida en pocos días. Esta vez los generales no ponen oposición. El tiempo atmosférico les favorece, la Wehrmacht ha tenido tiempo para entrenarse y poner a punto equipos y hombres y los recientes combates con los aliados en Noruega han calmado los nervios sobre la capacidad combativa de los aliados. Y como ya ha sucedido en otras ocasiones, el coronel Hans Oster, número dos del Abwehr, informa al agregado militar holandés en Berlín de la inminencia del ataque… En otro punto de la capital del Reich, el Ministro de Exteriores Von Ribbentrop entrega durante una rueda de prensa con periodistas y diplomáticos el “Libro Blanco” alemán sobre Noruega. Elaborado con documentos capturados a los británicos en Noruega, el “Libro Blanco” revela que los aliados tenían planes para invadir el país desde Enero, y que por lo tanto la acción alemana ha sido meramente un movimiento defensivo.
LONDRES: En la Cámara de los Comunes, el Ministro del Aire sir Samuel Hoare es el primero en contestar a Ribentropp, acusándole de mentir. Es Hoare quien lleva a cabo la réplica porque el grueso del gabinete británico está hoy reunido con sus contrapartes franceses en la novena reunión del Consejo Supremo de Guerra Aliado, cuya sesión tiene lugar en Downing Street. Como no podía ser de otra manera, la situación en Noruega es el principal punto del orden del día. La reunión es un fracaso absoluto: el Primer Ministro Francés Reynaud exige a los británicos que envíen más fuerzas a Noruegas, en tanto que Chamberlain se niega. Reynaud, quien además se contagia de la gripe, acusa a sus aliados de ser “viejos hombres que no saben asumir el riesgo”. Por su parte, Chamberlain se defiende señalando no sin algo de ironía que son precisamente británicos los soldados que están cayendo en Noruega.