Los primeros registros de su utilización surgieron alrededor del año 5000 A.C. en Babilonia. Machacaban algunas joyas semipreciosas: las aplicaban en los labios y alrededor de los ojos
Cleopatra utilizaba cochinillas para pintarse los labios con un tono rojo vibrante. Las cochinillas eran trituradas, que tenia un pigmento rojo profundo, y añadían también hormigas trituradas para la base
La barra de labios se hizo popular en el siglo XVI, cuando la reina Isabel I de Inglaterra y las damas de su corte, utilizaban una mezcla de cera de abejas y azufre de mercurio rojo
La primera barra de labios, tal y como la conocemos hoy, salió al mercado en 1915
Una mujer tipo consume entre kilo y medio a tres kilos de carmín a lo largo de su vida sólo por lo que se injiere por accidente
Las famosas esencias de perlas que se utilizaban para conseguir pintalabios con brillo eran en realidad escamas de peces
Durante la época dorada del islam, los físicos y químicos árabes-andaluces Abu al-Qasim al-Zahrawi (Abulcasis) inventaron la barra de labios sólida, que consistía en perfume y otros ingredientes que metían en moldes. El proceso se describe en la enciclopedia de medicina y cirugía Al-Tasrif
En 1770, el Parlamento Británico sacó una ley que decía que una mujer que llevase color en los labios podía ser juzgada como bruja y, de hecho, muchas mujeres murieron poner poner color en sus labios…
Max Factor, inventó el brillo de labios en 1930.
La barra de labios se hizo popular durante la Segunda Guerra Mundial gracias a la industria cinematográfica, cuando maquillarse se hizo común para las mujeres
En 1950, Hazel Bishop químico americano, desarrolló la primera barra de labios duradera y que no manchaba cociendo varios materiales al baño maría tras varios experimentos