Arnold Schwarzenegger es el líder de un grupo de operaciones especiales de la DEA. En su último trabajo son acusados de robar parte del dinero incautado a los carteles, así que son apartados del servicio activo unos meses mientras se buscan pruebas para esclarecer lo acontecido. A la vuelta de su actividad (pues no hay pruebas del robo del dinero), el equipo parece estar amenazado por los carteles, y cayendo uno a uno en violentos crímenes. La policía de homicidios Caroline (Olivia Williams), se encarga de los casos en los que están muriendo estos agentes especiales de la DEA.
Desde luego no es una película perfecta, pero tampoco se el pide algo así a una peli de acción, que a ratos destila un buen sabor a cine de serie B, y que bien podría haber dirigido en los 90 un tal John McTiernan. Además de tener buenas escenas de acción y bien rodadas, algunas de ellas, rozan el Gore, algo atípico en estos productos de factura rápida, y que los amantes de la casquería, seguro que lo agradecen.
En definitiva, una peli para pasar el rato, un buen rato entretenido, ideal para una tarde de verano. Yo la recomiendo, sobre todo si eres fan del cine de acción y del Chauche, por supuesto.