Sácale partido a tus ojos este verano

Por Misty Blue

Los ojos nos abren las puertas al mundo y abren al mundo las puertas de nuestro interior. A través de una mirada se pueden expresar millones de cosas y con un buen maquillaje podremos hacer nuestras miradas más intensas, dulces o pícaras. Para elegir el maquillaje apropiado deberás tener en cuenta el color de tu pelo y de tu piel.

Los ojos marrones permiten utilizar una gran variedad de tonos. Si tus ojos son oscuros deberás centrarte en intensificar su color, tanto el blanco como el marrón. Para ello puedes usar tonos cálidos (marrones oscuros, chocolates...) o grises (marfil, beis...).

Si lo que deseas es iluminar tu oscura mirada puedes apostar por un azul marino eléctrico. Los tonos rosas o pastel se encargan de suavizar tu mirada y darle un toque de dulzura.

Para darte un toque de elegancia puedes optar por colores metálicos como el dorado, el bronce o el cobre, que te darán glamour acompañados de la ropa apropiada. Aunque si eres atrevida puedes apostar un tono verde esmeralda, que te dará un aspecto impactante y espectacular.

Recuerda que los tonos demasiado claros apagan las miradas de ojos marrones y amarillean el blanco del globo ocular, por ello el azul y los tonos más claros del verde no son apropiados

Para ojos de tonos más claros como los verdes o los azules hay que tener más en cuenta el color de la piel y el cabello. Para las tonalidades más claras de piel y pelo puedes apostar por tonos como el pastel o el púrpura, aunque los malvas y morados también son apropiados para unos ojos claros. El color granate te aportará el máximo brillo e intensidad que puedes darle a tus ojos. Estos colores pueden acompañarse de sombras mate.

Si en cambio tu piel y tu cabello son oscuros no dejes de apostar por la amplia gama de marrones claros, que acompañado de sombras irisadas te darán un toque de elegancia inigualable.

No debes aplicar tonos rosas, grises ni azules en ojos verdes, ya que apagarán su brillo natural. En cambio, puedes jugar con los diferentes tonos verdosos y combinarlos para que el verde de tus ojos resalte más que nunca.

Para elegir cómo maquillar tus ojos debes tener en cuenta su forma y corregir los defectos que puedas tener.

En el caso de que la distancia entre tus ojos sea demasiado corta puedes aplicar sombras claras en la zona más próximas a la nariz e ir oscureciéndolas a medida que te alejas, trabajar tus cejas y usar abundante rímel. Si por lo contrario tus ojos están demasiado separados puedes hacer el proceso contrario, aplicar sombras más oscuras y más rímel a la parte más próxima a la nariz.

Para disimular los ojos hundidos aplica sombra clara en la parte inferior del párpado y sombras más oscuras bajo la ceja. Si utilizas eyeliner hazlo mejor en tonos grises o marrones; el negro dará demasiada profundidad a tus ojos, y no te excedas con el rímel. Si tus ojos son demasiado saltones un delineado fino no te favorecerá, utiliza abundantes sombras oscuras, mucho rímel y delinea el contorno de tu ojo con un trazo grueso negro.

Para alargar la mirada de unos ojos redondos puedes delinear un poquito más allá de tu ojo, aplica sombras claras en el inicio del ojo y más oscuras al final, y aplica rímel para dar más profundidad. En el caso de querer agrandar tus ojos no utilices sombras demasiado oscuras y, en lugar de marcar la línea del ojo, marca la línea de las pestañas y difumínala; por último, abusa del rímel, sobretodo en el exterior de la pestaña.