Pues resulta que a otro izquierdista pero de los de verdad le ha ocurrido en el chat de Saco lo que me sucedió a mí, que, después de haber sido atacado de la peor de las maneras por aquella jauría de lobos rabiosos, no le han dejado defenderse, en una clara manifestación de lo que el tal Saco entiende por libertad de expresión:
http://lucasleonsimon.wordpress.com/2011/05/03/los-nuevos-popes-y-aprendices-de-torquemadas/