Puerto de San Juan de Luz
Ciboure
Algunos de ellos se enriquecieron enormemente y se hicieron construir grandes mansiones que pocos años después servirían para acoger a destacados huéspedes. En aquella misma época, los preparativos de una boda se estaban llevando a cabo en la pequeña ciudad de San Juan de Luz (Saint-Jean-de-Luz en francés o Donibane Lohizune en euskera). Una boda que cambió no sólo la historia de la ciudad sino la de Europa si tenemos en cuenta que fue un casamiento apañado como uno de los 124 puntos del Tratado de los Pirineos de 7 de noviembre de 1659 el cual ponía fin a la larga guerra entre España y Francia. Una boda real que unía el Rey de Francia Luís XIV (el Rey Sol, el mismo que unos años más tarde trasladaría la corte de París al Palacio de Versalles) con la Infanta María Teresa de Austria, la hija mayor de Felipe IV, Rey de España.Casa de Luís XIV
Así pues, el rey de Francia, Luís XIV, acompañado de toda su Corte, vivió en esta casa durante los preparativos de la boda, algo más de un mes, del 8 de mayo al 15 de junio de 1660. Algunos años más tarde, en 1701, en esta casa se hospedó también su nieto el Duque de Anjou, futuro rey Felipe V, camino de Madrid para acceder al trono de España. Actualmente la casa Lohobiague-enea es un museo abierto al público.
Casa Luís XIV
Casa Luís XIV
Y mientras, Ana de Austria, la reina madre, se acomodaba en otra señorial mansión, Joanoenia, o “Casa de la Infanta”, también construida por otro rico armador a finales del siglo XVI. Es una bonita mansión en ladrillo rosa que acogió durante 2 días, del 7 al 9 de junio de 1660 ala futura novia María Teresa de Austria, sobrina y futura nuera ya que los novios eran primos hermanos por partida doble. A ver si me explico:Los padres del novio (Luís XIV, Rey Sol) eran Luís XIII de Francia y Ana de Austria.Los padres de la novia (María Teresa de Austria) eran Felipe IV, rey de España y hermano de Ana de Austria e Isabel de Francia, hermana de Luís XIII.Ayuntamiento
Plaza Luís XIV
Plaza Luís XIV
Fue necesaria una dispensa papal debido al cercano parentesco de los novios.La Infanta María Teresa recibió como regalo de Luís XIV un famoso broche de esmeraldas en forma de pera con brillantes y dos vestidos a la moda francesa que le ofreció la reina madre, uno bordado con diamantes y otro con perlas.La boda tuvo lugar el 9 de junio en la Iglesia de San Juan Bautista, que resultó demasiado pequeña para acoger a los invitados. El rey regaló parte del mobiliario y piezas de orfebrería que aun se conservan, mientras que la futura reina regaló el barco que cuelga del techo.
Casa de la Infanta
Interior de la Iglesia de San Juan
Barco que regaló la Infanta María Teresa
Desde la Plaza Luís XIV podemos dirigirnos hacia el puerto donde se encuentra la mansión Joanoenia inspirada en un palacio veneciano (sólo se pueden visitar dos habitaciones que albergan exposiciones temporales). Tras las barcas de pescadores, en la orilla opuesta del río Nivelle se encuentra Ciboure, y desde el puerto obtenemos una bonita vista general.Vista de Ciboure
Vista de Ciboure
De la Plaza Luís XIV sale también la Rue Gambetta, calle donde vivían los pescadores y actualmente la más comercial y animada de San Juan de Luz. Es en esta calle donde se encuentra la Iglesia de San Juan Bautista, considerada una de las más grandes y representativas del País vasco.Calle Gambetta
Campanario de la Iglesia de San Juan desde la Plaza Luís XIV
Iglesia de San Juan Bautista
Iglesia de San Juan Bautista
Rue Gambetta
Si seguimos bordeando el puerto se llega a la playa, la Grande Plage, el atractivo principal para la mayoría de los que visitan la ciudad, tanto en siglos pasados como en la actualidad. La belleza y tranquilidad de su bahía la convierten en un lugar ideal para el baño.El paseo marítimo es poco común ya que se encuentra elevado. Afortunadamente se han conservado las antiguas casas de arquitectura típica vasca, conectadas al paseo por un pequeño puente de madera.
Grande Plage
Paseo marítimo
Su clima suave y la moda de los baños de mar empiezan a atraer a los primeros extranjeros, a principios de siglo XVIII, principalmente ingleses ricos. Poco a poco, San Juan de Luz se puso de moda como lugar de veraneo entre la aristocracia inglesa y francesa, por lo cual se construyeron lujosos hoteles con todas las comodidades, como agua corriente, poco habitual en la época. Destaca el arquitecto André Pavlovsky que con su estilo innovador fue cambiando el aspecto de la ciudad.Paseo marítimo
Casa del Paseo marítimo
Es interesante también darse una vuelta por el mercado, siempre animado aunque especialmente los martes y viernes cuando acuden más granjeros de la zona a vender sus productos artesanales.Mercado de San Juan de Luz