Windows 10 ha sido anunciado como la última versión de Windows que necesitarás en toda la vida. Esta es una gran noticia para la informática interna. En lugar de grandes actualizaciones abruptas de la versión del sistema operativo, como el salto pesado entre Windows 7 y 8. La entrega de Windows 10 como Windows Service para Windows 10 permitirá mejoras. Así como actualizaciones incrementales regulares.
La expectativa es eliminar el arduo proceso alargado de migraciones de Sistema Operativo. Ya que estas requieren una planificación, capacitación y horas de trabajo significativas. Para aquellos que necesitan más incentivos, también existe la fecha límite inminente Windows 7. Se estima que en enero de 2020 el siempre fiel Win 7 y sus actualizaciones dejen de existir. Por supuesto, para llegar a Windows 10, el sistema debe soportar una gran actualización final.
Afortunadamente, Microsoft ha dado grandes pasos para simplificar el proceso de migración de Windows 10. El proceso de implementación se ha hecho mucho más ágil hoy en día. Esto gracias a las nuevas metodologías de implementación. Las mismas utilizan imágenes, secuencias de tareas y paquetes de aprovisionamiento.
Migrar a Windows 10 representa muchos desafíos
Sin embargo, eso no significa que no haya desafíos en el proceso. En su lugar, los obstáculos radican en la estandarización del espacio de trabajo del usuario. Son los detalles de garantizar que todos los ajustes de configuración, apps, impresoras y protectores de seguridad son entregados. Para garantizar así un entorno de trabajo productivo y seguro.
En una encuesta reciente se propuso aprender de primera mano sobre experiencias de empresas en su migración a Windows 10. La misma fue realizada por PolicyPak y GPanswers.com. El objetivo era encontrar los desafíos inherentes que enfrentan las empresas. Y si los hay, descubrir el impacto de los problemas encontrados y cómo se corrigieron.
Los resultados muestran que algunos aspectos de Windows 10 no migran de la manera más automática posible. Esto a pesar de una mayor variedad de herramientas para simplificar el proceso general de implementación. La encuesta involucró a más de 500 organizaciones que representan 30 países y múltiples industrias. Las organizaciones varían en tamaño desde pequeñas empresas de menos de 100 usuarios hasta empresas con más de 5,000 usuarios.
Analizando los resultados de la encuesta de PolicyPak y GPanswers.com
El primer objetivo de la encuesta fue averiguar dónde se encuentran actualmente las empresas en el proceso de migración. Se identificaron cuatro etapas: Planificación, Solo piloto, Migración intermedia y Casi completa.
En promedio, alrededor del 26 por ciento de todas las organizaciones todavía estaban en la etapa de planificación. La mayor disparidad se produjo dentro de las organizaciones que están a punto de finalizar. Esto al comparar los resultados de la encuesta de acuerdo con el tamaño de la empresa.
Por otro lado, el 42 por ciento de las pequeñas y medianas empresas con menos de 100 empleados se identificaron a sí mismas como en la fase final del proceso de migración. Y solo el 13 por ciento de las más de 5,000 empresas usuarias informan que sus implementaciones están casi completas. Asimismo, el 33 por ciento de grandes empresas se identificaron a sí mismas como en la etapa de migración media. Y solo el 10 por ciento de las PYMES informaron lo mismo.
Al final, la encuesta muestra que el proceso de migración de Windows 10 no es tan eficiente como muchos esperarían. Todavía hay un grado considerable de prueba y error involucrado en el proceso. Muchas organizaciones necesitan alguna manera de simplificar el proceso posterior a la implementación. Eso a pesar de la introducción de nuevas herramientas. Y también deben reducir el tiempo y los costos involucrados para superar los desafíos de migración experimentados.