En el viaje a París que gané en el concurso el año pasado, me llevaron a un restaurante donde probé una cosa muy curiosa y que jamás se me habría ocurrido. Era un lomo de salmón casi crudo (vuelta y vuelta) en el que iba sobre una cama de verduras salteadas. Lo curioso es que te traían caldo de pollo casero hirviendo y te cubrían el salmón con él. El propio calor del caldo terminaba de hacer el salmón y las verduras en el plato... os garantizo que de todo el menú degustación, fue uno de los mejores platos.
Nunca se me habría ocurrido poner caldo de pollo a un salmón fresco y os recomiendo probarlo un día porque no perdéis nada, el juego de sabores es impresionante! Además es una receta muy fácil de salmón y muy vistosa.
Elaboración
- 1 lomo de salmón por persona
- 300 gramos de guisantes frescos
- Caldo de pollo casero
- Sal
1.- Comenzamos sacando los guisantes de sus vainas, una vez listos, los cocemos durante unos 15 minutos, si es posible en el caldo de pollo casero que tengamos hecho. Es importante que este caldo lo hagamos de forma casera porque en este caso cambiará mucho el plato.
2.- Os dejo el enlace para hacer el caldo de pollo y así no repetirme receta a receta.
3.- Pasamos por la plancha el salmón, vuelta y vuelta. Lo tenemos que dejar crudo por dentro porque luego en 2 minutos se terminará de hacer en el plato junto con el caldo y los guisantes. Emplatamos poniendo como cama los guisantes, luego el salmón y en la propia mesa servimos el caldo de pollo sobre los lomos de salmón, esperamos un par de minutos y a comer.