Con el comienzo del Salón del Manga, las editoriales empiezan a dejar caer pequeñas dosis de información. La primera noticia destacable para muchos/as shojeros/as viene, como no podía ser de otra manera, de Ivrea, la única editorial que sigue apostando por el género a pesar del notable incremento de títulos shônen en su catálogo. De momento, lo único que se les ha sacado es que están interesados en esta popular serie de, hasta el momento, 20 tomos y abierta, obra de Natsumi Aida. Teniendo en cuenta que ya han acabado, o están a punto de hacerlo, diversas series extensas, esta puede ser la obra ideal para llenar el hueco que deje alguna de ellas.
Nika Tamiya es una chica de 17 años muy guapa y sociable, bastante popular en su instituto. Tiene el peinado perfecto, buen gusto para vestir, y es amiga de todo el mundo. No obstante, lo que nadie sabe de su instituto, excepto su mejor amiga, es lo mucho que le cuesta mantener ese aspecto a Nika. Cuando está en casa, cambia totalmente: es una chica descuidada y avara que usa gafas, viste ropa zarrapastrosa y tiene el pelo recogido hacia atrás con una cinta y diversas gomas. Se pasa la tarde tirada por casa leyendo manga o jugando a la consola. Su actitud con los demás es mandona e irritante.
Sin embargo, no tarda en aparecer una persona que pasa a conocer el secreto de Nika junto a su mejor amiga. Se llama Arata Kamiyama y es un alumno recién transferido al instituto de Nika. Ella descubre su pequeño secreto: cuando está en las clases, Arata usa unas enormes gafas y lleva el pelo revuelto, lo que le da aspecto de friqui, pero en casa se quita las gafas y resulta ser guapísimo. Arata es justo el caso contrario de Nika pero, ¿por qué?