Hoola de nuevo, vengo otra receta de la región de Roma, este plato de carne es muy típico allí y la verdad es que no nos dejó indiferentes, que riico está y es muy fácil de preparar!!
Con esta entrada os quiero transportar a Pompeya, al valle del misterio que se esconde bajo las cimas del volcán Vesubio.
Pero antes mi
SALTIMBOCCA A LA ROMANA
2 personas:
2 filetes de ternera 2 lonchas grandes o 4 pequeñas de jamón serrano Harina unas cucharadas de Mantequilla 2 hojas de salvia 1 vasito de vino blanco sal y pimienta
Colocar una loncha de jamón y una hoja de salvia sobre cada uno de los filetes de ternera, enganchamos con palillos para que no se separe, cubrirlos con papel film.
Con el mazo del mortero vamos pegándoles golpes a la carne para que el sabor del jamón y la salvia penetren dentro de la carne.
Quitamos el papel film y pasamos por harina los filetes que freiremos con la mantequilla derretida en la sartén.
Les damos unas vueltas y salpimentamos.
Cuando los filetes estén bien cocidos los sacamos de la sartén y reservamos quitándoles la salvia y los palillos para emplatar.
A la sartén sin lavar le añadimos el vino y dejamos reducir.
Los filetes los servimos con la salsa obtenida por encima.
Solo entrar por las puertas del pueblo ya quedas impactada por sus ruinas.. un pueblo con sus calles.. sus casas.. aceras... panaderías, como no.. Anfiteatros!!
Ese día nos levantamos a las 5:15 de la mañana para coger el primer tren, 2 horas y media después estábamos en Nápoles, en el puerto esperando a mis suegros que venían de crucero.. un día en pompeya con ellos se iba a convertir en toda una aventura.
Cogimos otro tren de Nápoles, uno regional para ir a Pompeya y en 45 minutos estábamos ante sus puertas.
Una de las imagenes que mas me impactaron fueron la de las personas que murieron fosilizadas por la lava, gases... del volcán...
Parece mentira pero es cierto.. y aunque ya sabes lo que te vas a encontrar nunca dejas de sorprenderte al verlo.
El Vesubio enterró esta ciudad en el año 73 después de cristo, y esto te lo repites mucho paseando por sus calles, pues ves lo avanzados que estaban y no lo puedes creer, sus hornos de leña... sus tabernas.. sus cocinas... incluso sus Clubes