A la hora de cocinar, ¿realmente conoce su aceite?
Algunos aceites son excelentes para altas temperaturas, otros no pueden ponerse al calor. Algunos son para el corazón, mientras que otros están cargados de grasas saturadas.
“Como nutricionista, quiero un aceite que sea saludable, y cuando cocino, quiero un aceite que sea versátil y que rinda de manera consistente”, dijo Manuel Villacorta, RD, autor de “Whole Body Reboot”.
Sarah-Jane Bedwell, R.D., columnista de nutrición en “Self” y autora de “Schedule Me Skinny”, repite a Villacorta, e indica que lo ideal es un aceite para cocinar todos los días que tenga un bajo nivel de grasas saturadas y que tenga una alta tolerancia al calor.
“Es importante que la gente comprenda la diferencia entre los aceites de cocina ya que no se pueden utilizar indistintamente en todo lo que cocina,” dijo. “Con el aceite 100 % de canola, sé lo que estoy poniendo en mi cocina y en mi plato. Es saludable y va bien con todo – un aceite de cocina ‘todo en uno’.”
Estas son cuatro razones por las que tanto Villacorta como Bedwell prefieren el aceite de canola:
Es saludable.
El aceite de canola contiene la menor cantidad de grasas saturadas, cerca de la mitad de lo que contienen los aceites de oliva, de soja, de maíz y de girasol, y la mayor cantidad de omega 3 de origen vegetal de todos los aceites de cocina comunes. Las investigaciones muestran que comer 1 1/2 cucharadas de aceite de canola diariamente en lugar de grasas saturadas puede ayudar a disminuir el riesgo de cardiopatía isquémica.
El aceite de canola puede ayudar además a controlar el azúcar en sangre en las personas con diabetes tipo 2.
Es neutro.
El aceite de canola no tiene gusto y tiene una textura liviana (a diferencia de los aceites de oliva o de coco), que es lo que usted quiere cuando prepara un banquete mejicano especiado, tarta de pastel de limón o un aderezo de hierbas-atadas, como Salsa Vinagreta o vinagreta de limón con miel. Los sabores de sus ingredientes, no su aceite, son los protagonistas.
Otros aceites tienen una textura más pesada que la del aceite de canola.
Puede exponerse al calor. Ase a la parrilla, dore o fría según más le complazca. El aceite de canola tiene una de las tolerancias más altas al calor de todos los aceites de cocina (punto de humeo a 468 °F), por lo que es un compañero de cocina ideal.
Es asequible. El aceite de canola cuesta casi lo mismo que el aceite vegetal, pero con el aceite de canola, sabe qué aceite tiene en la botella. El aceite vegetal puede en realidad tener cualquier cantidad de diferentes aceites.
Salsa Vinagreta
Rinde: 1 taza
1/2 taza de salsa
1/3 taza de agua
2 cucharadas de aceite de canola
2 cucharadas de jugo de lima
1 cucharada de cilantro picado
1 cucharadita de azúcar granulada
1 diente de ajo, machacado
En un recipiente con tapa hermética, combine la salsa, el agua, el aceite de canola, el jugo de lima, el cilantro, el azúcar y el ajo. Agite bien.
Vinagreta de limón y miel
Rinde: 1/2 taza
2 cucharaditas de ralladura de limón finamente picada
1/4 taza de jugo de limón fresco
1 1/2 cucharadas de miel
1/4 cucharadita de sal
1/4 cucharadita de pimienta negra molida
1/4 taza de aceite de canola
En un tazón mediano, mezcle la ralladura de limón y el jugo, la miel, la sal y la pimienta. Añada lentamente el aceite de canola, mientras bate enérgica y continuamente hasta emulsionar. Sirva con verduras.
Fuente: elobservador.com