“Un combatiente puede morir pero no sus ideas”
Mientras el gobierno de México se encuentra desarrollándose de manera que divide las opiniones públicas pero que parece unificar la política bajo una sola bandera, sucede una tragedia: el activista náhuatl Samir Flores es asesinado.
El activista, impulsor de una organización contra el Proyecto Integral Morelos, fundador de la Radio Comunitaria Amiltzinko así como un fuerte defensor de los derechos humanos de indígenas y población en genera; que junto a otro grupo de activistas indígenas de la zona se había postulado fuertemente encontra del ya mencionado PIM que contemplaba la operación de un gasoducto así como de la puesta en marcha de una termoeléctrica en el centro de Amilcingo, promovido dicho proyecto por el gobierno federal. Siendo el pasado martes 19 de febrero el día en que el activista junto a compañeros suyos habían cuestionado varias posturas y aseveraciones que el gobierno había hecho sobre la termoeléctrica en Huexca y el PIM, a través del superdelegado Hugo Erik Flores.
EL Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y el Agua comunicaron que el pasado 11 de febrero habían advertido al presidente Andrés López que “sus declaraciones en apoyo a la termoeléctrica y el discurso de descalificación y odio que realizó en Cuautla a los defensores de la tierra y el agua (…) podrían generar mayor violencia”, ya que en torno al PIM se ha generado un ambiente de hostilidad en la comunidad. Y que ante la próxima consulta popular que el gobierno planea realizar para decidir el futuro de el proyecto y la termoeléctrica, se tornan misteriosas las situaciones que rodean a su asesinato.
El activista falleció aproximadamente a las 6 am. del día miércoles 20 de febrero tras ser atacado fuera de su domicilio en Amilcingo con armas de fuego. En el lugar de los hechos se ecnotró un mensaje segú el fiscal, el cual no reveló su contenido.
Ante tal situación el descontento ha crecido en gran manera, siendo el Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y el Agua quién responsabiliza al Gobierno Federal del asesinato pues “Samir no tenía más enemigos (…) este fue un crimen político por la defensa de los derechos humanos que Samir y el FPDTA lleva contra el Proyecto Integral Morelos y por la autonomía y autodeterminación de los pueblos (…) este asesinato es resultado de la omisión de este y los gobiernos anteriores de resolver por la vía del diálogo el conflicto que genera el inviable Proyecto Integral Morelos” según el FPDTA.
Mientras tanto el presidente Andrés Manuel López Obrador condenó el asesinato de Samir y calificó el hecho como “desafortunado”, sin embargo dijo que esto no es argumento para cancelar la consulta que convocó para los días 23 y 24 de febrero en Tlaxcala, Puebla y Morelos, a fin de conocer la opinión de las personas en torno a la termoeléctrica de Huexca.
Sin embargo sólo queda lamentar la tragedia y esperar que se esclarezca el crimen, aunque para el conocimiento general esto será prácticamente imposible en un país donde la impunidad y corrupción son el pan de cada día.