San Marcos, la punta del iceberg

Por Eloy

Para quien ha estudiado poco o mucho de marxismo, y todas sus vertientes que terminan en diferentes ismos; sabe bien que los promotores y seguidores del PCdP existen en varias partes de la sociedad peruana.(i) En ese sentido, no debe sorprendernos que en la primera universidad del Perú, la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, estén presentes. Que esto, ahora, sea noticia última, sólo obedece a factores políticos externos e internos por la que atraviesa la Universidad de San Marcos, como universidad pública que es.

En cuanto a los factores externos, estos se encuentran en el ciclo de la política peruana, el cual se aproxima a un proceso electoral, no sólo municipal en pocos meses sino también general a menos de un año. El actual gobierno está entrando a su último año de gestión, y las fuerzas políticas resultantes de una confluencia de intereses económicos y políticos convergen de un lado a otro. A la ofensiva conservadora sobre la PUCP, hace pocos meses, ahora se suma una ofensiva sobre la principal universidad pública del país, que insinúa una intervención para restabecer el "orden", como en los tiempos del primer gobierno aprista o de la década del fujimorato.

Sabedores somos, que desde San Marcos siempre habrán voces o discursos contra la continuación del actual modelo económico, social y político instalado en el país desde agosto de 1990. Por ejemplo, en este año de campaña electoral, donde el actual Alcalde de Lima será próximo candidato a la presidencia, que muy a pesar de sus carteles publicitarios nos comuniquen que la obra de la Av. Venezuela ha sido culminada, tiene aún un asunto pendiente en esta, pues no sólo está en juego un "by-pass", sino el menoscabo de la universidad pública y la supremacía de la concepción de modernidad como prototipo de desarrollo, donde encementar o construir se entiende como superior.(ii)

Por ello, señalar que una intitución es "senderista" o se está "senderizando", no sólo sirve para llevar no unos cuantos votos al molino de los supuestos embanderados de la lucha anti-subersiva, sino también para todos aquellos que quieran sintonizar con el ciclo político del año venidero. Por esa razón es el "escándalo".Sin embargo, nada se dice de los problemas fundamentales por la que atraviesa la universidad pública, que tienen que ver con la ausencia de una verdadera política de inversión en ésta. ¿Porqué el Presidente de la República no insinúa una política de gasto e inversión interventora en la universidad pública? Pero no, nada se dice tampoco, al menos no en la misma magnitud, de la desinstitucionalización cada vez mayor, colindante con lo ilegal y la corrupción por la que actualmente atraviesa la primera universidad de América.

Deterioro de la institución, que es concomitante a la elección de un nuevo Rector el próximo año.Esto último, es el aspecto interno que ha generado la noticia. San Marcos, viene operando con un modelo universitario agotado. Las autoridades se eligen no en función de proyectos o programas. Esto está ausente en su proceso electoral, o están ausentes los candidatos cuando llega el momento de sostenerlo públicamente. La elección de autoridades termina  resolviéndose en función de los interes políticos o económicos de un pequeño grupo, ya sea de docentes o de estudiantes, a espaldas de los intereses de la mayoría. En ese sentido, la corrupción de la dirigencia estudiantil es endógena en este modelo.

Pero, lo que ha puesto en evidencia la decadencia del modelo de elección universitaria, contradictoriamente, es su propia crisis, ya que ha conllevado ha generar en los estudiantes una expectativa de cambio. Y para la concretización de estas, se requiere que sus nuevas autoridades expresen sus intereses. Y dado que el modelo actual de elección no le garantiza ello, ha empezado poco a poco a institucionalizarse el referendum estudiantil como una manera de "condicionar" a sus dirigentes estudiantiles en la elección de autoridades, de tal manera que el resultado del referendum se traslada como voluntad mayoritaria de la comunidad universitaria. E inclusive forzando por encima de los estamentos, propios de la concepción del modelo obsoleto de elección universitaria; donde el voto de un estudiante es insignificante frente al de un docente; ya que la fuerza social de los estudiantes es tal que los docentes, que también tienen expectativas de cambio, terminan por adherirse a esa fuerza.(iii)

Pero, justamente, estas crisis y sus nuevas fuerzas, está colisionando con viejos y caducos intereses,  la de aquellos que sólo ven la Universidad de San Marcos, y seguramente la de todas las universidades públicas, como un espacio político o un botín económico. Los primeros que operan en la lógica de los 70 y 80. Y los segundos en la lógica de los 90 y de esta última década. Justamente, en el primer grupo se encontrarían los seguidores del PCdP, que tienen su propio objetivo como cualquier grupo político, el cual no necesariamente es de la misma naturaleza de la universidad por la que apuesta la mayoría. Y mientras persista la elección por estamentos, estos y todos los grupos tendrán espacio para operar. 

En cuanto al segundo grupo, no som más que una extensión del modelo de conducta "fujimontesinista", donde la lógica de ver el Estado como un botín, se recuce a la Universidad vista simplemente como un botín. Este tipo de conducta se acentúa con la "comisión reorganizadora" instalada por el gobierno de Fujimori, y que paradójicamente sirvió de guarida a los grupos de los que hoy tanto se cuestiona.Pero, la problemática de la realidad universitaria no se agota en un problema presupuestal y en el decadente modelo de elección; sino en la misma situación política por la que atraviesa el país. Ya que en tanto persista la miseria, la injustica y la corrupción en el ámbito de las autoridades públicas; persisitirán las condiciones para propuestas políticas donde la universidad no es punto de agenda, olvidando el rol que ésta puede tener para alcanzar una sociedad más justa y verdaderamente libre.

Por tanto, la elección universal de autoridades universitarias y una política intervencionista de inversión pública en las universidades, le darían una nueva dinámica a la Universidad de San Marcos, aunque esto no implique la resolución inmediata y total de todos sus problemas.Así, al finalizar la primera década del siglo XXI, San Marcos, la primera universidad pública del país, se convierte hoy en el centro estratégico de acciones políticas de diversos grupos, desde los más conservadores hasta los más radicales, se convierte en la punta de iceberg de la situación política de lo que viene en estos doce meses siguientes. 

(i) Llamados como "senderistas".

(ii) A propósito que nuestro Alcalde se graduará de Arquitecto en la "prestigiosa" Universidad Alas Peruanas. Ver  http://elcomercio.pe/noticia/372613/alcalde-castaneda-lossio-se-graduara-arquitecto-alas-peruanas

(iii) Este mecanismo de elección estudiantil, también deja sin espacio de maniobra a los llamados "operadores" de estudiantes, que son una especie de promotores de listas estudiantiles, con la finalidad de alcanzar votos y negociar favores políticos y económicos. En ese sentido, el triunfo y la imposición de los resultados del referendum se transforman en la derrota de estas pequeñas mafias.