Faro 'Punta de la Silla'
Su construcción fue incluida en el Primer Plan de Alumbrado, bajo el reinado de Isabel II, entrando en funcionamiento el 27 de diciembre de 1871.La torre del faro se encuentra a 43 metros del nivel del mar, y tiene 9 metros de altura, con un alcance de 24 millas náuticas.
El municipio de San Vicente de la Barquera se enclava en el norte de España, en la costa occidental de Cantabria, en torno a las rías de Rubín y Pombo, cuyos brazos rodean casi por completo las colinas sobre las que se asienta la puebla vieja, magnífica muestra del esplendor histórico que tuvo la villa en la Edad Media gracias a sus gestas marineras.
Pero además en este milenario enclave de acusado sabor pesquero y marinero, San Vicente ofrece al visitante un entorno en el que predomina la naturaleza.
La silueta del castillo y de la iglesia de Santa María de los Ángeles, recortada contra el perfil imponente de los Picos de Europa, es una imagen que sintetiza alguno de los aspectos más significativos de la esencia histórica de Cantabria: el vínculo atávico con el mar, el "cruce de caminos" espirituales las rutas jubilares Jacobea y Lebaniega, y la determinante omnipresencia de la montaña.En el municipio de San Vicente de la Barquera existen testimonios arqueológicos de la presencia humana en la Edad del Bronce.
Algunos autores identifican Evencia como poblamiento de San Vicente en la España romana y suponen que el puerto de Apleca, del que hay referencias documentales en el año 1068, corresponde a San Vicente, ya que el nombre del santo mártir aragonés que hoy perdura no aparece hasta los albores del siglo XIII, y a él se uniría el calificativo ‘de la Barquera’, que era el promontorio fronterizo a la playa que cerraba por el noroeste la bahía.
La tradición sostiene que el castillo o fortaleza se edificó en el reinado de Alfonso I y con posterioridad se formaría la muralla defensiva que cerraba la villa, hasta la explosión demográfica que se produjo a partir del siglo XIII. Desde el principio tomará un significado carácter pesquero, en función precisamente de la riqueza de la ría y de las posibilidades de la mar.
La cofradía de los mareantes adoptó el nombre del patrono y, según sus normas más antiguas, que datan del año 1330, se ocupó de todo lo concerniente a la pesquería y comercialización: regulación de costeras, establecimiento de sistemas de auxilio y seguridad en la mar, elección de cofrades y el control de la vida municipal.
Desde el punto de vista administrativo, San Vicente formó parte, a partir del reinado de los Reyes Católicos, del Corregimiento de las Cuatro Villas de la Costa de la Mar, como consecuencia de la formación de un nuevo distrito territorial del Reinado de Castilla, que sucedió al corregimiento de las Asturias de Santillana, en el cual la villa se había integrado. En ocasiones (1514-1521), la villa marinera formó su propio Corregimiento juntamente con el valle de Peñamellera.
También San Vicente de la Barquera fue capital de la Hermandad de las Cuatro Villas de la Mar, según lo establecido en la Junta de Bárcena de Cicero de 1555. Celebró sus reuniones preferentemente en las sedes de las grandes villas y en San Vicente, concretamente en los años 1575, 1582, 1613, 1628, 1635, 1666...