No es la primera vez que hablamos de que las sandias se han enviciado, es mas son muchas las veces que teniendo este cultivo de regadío lo que hacen es crecer y crecer y no dar buenos frutos, en esta ocasión nos ha pasado esto, al tenerlas en el mismo lugar que los pepinos nos hemos dado cuenta de que están tendiendo al crecimiento, al igual que los tomates, pero no en la fructificación. Hemos decidido dejarlas pasar algo de sed, es decir ver como reaccionan ante la falta de riego con el fin de que comiencen a dar frutos y luego comenzaremos a regar. En los tomates nos ha pasado lo mismo, tenemos matas que llegan a la altura de mas de un metro pero escasos de frutos.
Este año la variedad arrallada que es la que hemos tenido en nuestro huerto presenta una gran mata, alguna flor pero muy pocas sandias de tamaño considerable, sabiendo que su fecha de plantación es entorno a principios de abril, las tempranas estamos teniendo el mismo desarrollo que las tardías con mas de mes y medio de diferencia. Si las cosas hubiesen ido bien deberíamos de haber cortado ya algunas sandias y no que hemos llegado a esta fecha sin tener previsión de alguna para cortar, es mas algunas que han fructificado llevan con un tamaño pequeño mas de quince días, cuando el periodo de la sandia es entorno a los 21 dias desde que cuaja la flor.