Se trata de unos sandwiches sencillos pero con un ingrediente especial que descubrimos hace poco haciendo la compra.
Ingredientes:
Pan de molde sin corteza.
Una bola de morcón.
Queso de Roncal.
Lechuga.
Mayonesa de wasabi.
Aceite de oliva o Mantequilla.
Preparación:
En primer lugar decir que se pueden comer fríos o calentitos pero yo los hice en la sartén con un poco de aceite de oliva o untando las rebanadas de pan en mantequilla y calentándolas hasta que el pan esté dorado.
Después cortaremos rodajas de morcón y las colocaremos sobre el pan y sobre estas pondremos el queso de roncal cortado también en lonchas finas. Cada rebanada se debe de untar con una capa fina de mayonesa de wasabi, debe ser poca cantidad porque pica mucho si se pone en exceso.
Para terminar colocaremos encima de todo un trozo de lechuga y cubriremos nuestro sandwich con otra rebanada de pan.
En la foto lo acompaño de gazpacho y ensaladilla de surimi de cangrejo, todo bien frío.
Esta versión puede modificarse cambiando el morcón por jamón de york o por lo que a cada uno más le guste.
Con esta receta me despido unos días del blog para descansar y volver en septiembre con más ánimos.
Gracias por el comentario.