Por otro lado la declaración de que "hay que abrir el debate de si debemos proveer todos los servicios sanitarios gratuitamente a un señor que gane 100.000 euros", manejada junto a la concepción de que hay que "racionalizar gastos y eliminar lo superfluo e ineficiente" no debe ser recibida con gusto por los señores que ganan ese dinero... las señoras esta vez se salvan. El problema no es ya que aquellos que pudieran costearse los gastos sanitarios gracias a sus ingresos se les vete la entrada a la sanidad pública, sino que si se inicia la fractura de la sanidad pública, universal y gratuita descartando a los más ricos, será la excusa perfecta para continuar la negación a aquellos con enfermedades muy costosas, o aquellos que han enfermado por vidas poco 'saludables'... pero mejor no dar ideas.
Fuente:
http://politica.elpais.com/politica/2012/04/09/actualidad/1333954688_207882.html