Sant Jordi transforma Barcelona en una ciudad literaria

Publicado el 22 abril 2014 por Vivelibro @infoviveLibro

El día de San Jorge conmemora la muerte de Jorge de Capadocia, santo católico, el 23 de abril de 303. Es, además, considerado el patrón de, entre otros, Inglaterra, Georgia, Etiopía, Bulgaria, Tombuctú o Portugal. En España lo es en las comunidades autónomas de Islas Baleares, Aragón y Cataluña, así como de Cáceres, Alcoy o Golosalvo (Albacete). En la República Argentina es patrón de la ciudad de Pichanal. Además, la Unesco declaró en 1996 el 23 de abril como Día Internacional del Libro y es también el patrón de los Scouts.
La leyenda dice que en Capadocia había un dragón que atacaba al reino. Muertos de miedo, los habitantes decidieron entregarle cada día dos corderos al dragón para satisfacer su hambre y que no atacase la villa. Pero cuando los animales empezaron a escasear se decidió enviar a una persona —escogida por sorteo— y un cordero. Aquella familia que veía cómo un miembro era devorado por el dragón recibía, a cambio, todo tipo de riquezas como compensación.
A partir de aquí, hay dos versiones de la leyenda: por un lado, que el pueblo se cansó de que ningún miembro de la familia real fuera enviado y que por tanto debía ser la princesa quien fuera devorada y, por otro, que un día fue la princesa la escogida por sorteo para acompañar al cordero. Sea como fuere, de camino hasta la cueva del dragón, la princesa se encontró al caballero Jorge y éste, matando al dragón clavándole su espada, la rescató. De la sangre que brotó del cuerpo sin vida del monstruo nació una rosa roja que el caballero le entregó a la princesa.
El rey ofreció al caballero todas las riquezas a imaginar, pero él prefirió que se repartieran entre los habitantes del reino. Además, se construyó una iglesia en su nombre, de la cual brotaba un agua milagrosa que era capaz de curar a los enfermos.
Por eso, en Cataluña, Baleares y en partes de la Comunidad Valenciana es costumbre cada 23 de abril que los hombres regalen rosas a las mujeres, como si de un caballero y una princesa se trataran. Ellas les regalan un libro, recordando el enterramiento y fallecimiento respectivamente de dos grandes de la literatura europea, Cervantes y Shakespeare, y otro hispanoamericano, Inca Garcilaso. En Aragón Sant Chorche (San Jorge) es el patrón de la comunidad y su festividad también se celebra el día 23 de abril como Día de Aragón.
UN LIBRO Y UNA ROSA
La costumbre de que el hombre regale una rosa a la mujer se remonta al siglo XV. Algunas versiones hacen coincidir esto con la Feria de las rosas que tenía lugar en Barcelona en aquella época. A las mujeres que el 23 de abril asistían a la misa oficiada en la capilla de Sant Jordi del Palacio de la Generalitat de Cataluña se les regalaba una rosa. Esta tradición se documenta también en el siglo XVII. En la actualidad, la rosa roja (que simboliza la pasión) suele ir acompañada de la señera y una espiga de trigo (símbolo de la fertilidad). Es un obsequio entre las parejas, pero se efectúa también entre todos los seres queridos (familiares, amigos, colegas).
El Día de San Jorge (Diada de Sant Jordi en catalán) tiene un aspecto reinvindicativo de la cultura catalana y muchos balcones lucen la bandera catalana. En toda Cataluña se venden rosas y libros, llegando a su máxima expresión en las Ramblas de Barcelona, donde a los puestos habituales se añaden otros para la ocasión. En las últimas décadas se promueve también mucho la venta de libros con firmas de los autores y un descuento en el precio de venta, ya que el 23 de abril es oficialmente, desde 1929, el día del libro por ser el día (de 1616) en que murieron Miguel de Cervantes y William Shakespeare (en rigor, ninguno de los dos murió este día: Cervantes murió el 22 y fue enterrado el 23; Shakespeare murió en la fecha indicada del calendario juliano, que corresponde al 3 de mayo del calendario gregoriano). Normalmente también se realizan actividades en las bibliotecas y conciertos en las calles, que se añaden a la agenda cultural de la Ciudad Condal.
¿CUÁNDO SE CELEBRÓ POR PRIMERA VEZ LA FERIA DEL LIBRO DE SANT JORDI?
La idea de celebrar un día dedicado a los libros surgió del escritor valenciano, afincado en Barcelona, Vicent Clavel Andrés, quien lo propuso a la Cámara Oficial del libro de Barcelona. Dando la Cámara el visto bueno y tras llevarlo a consulta del rey Alfonso XIII y del presidente Miguel Primo de Rivera, éstos dieron su beneplácito para que se celebrase en Barcelona la primera Feria del libro el 7 de octubre de 1926. Se escogió esta fecha como conmemoración al día en que nació uno de los más ilustres representantes de las letras castellanas: Miguel de Cervantes.
Fue cuatro años más tarde, en 1930, cuando se decidió trasladar la fecha de la Feria del Libro de Barcelona al 23 de abril por dos importantes razones: la primera por motivos meteorológicos, ya que durante la primavera la temperatura para realizar este tipo de eventos era mucho más propicia que en otoño. El segundo motivo, y no menos importante, era la coincidencia en la fecha de la muerte tanto de Miguel de Cervantes como la de otro gran escritor universal: William Shakespeare.
La Feria del Libro en su nueva fecha de celebración comenzó a adquirir muchísima más relevancia, ya que coincidía que en Barcelona (y toda Cataluña) el 23 de abril ya era un día muy especial en el que en se celebraba de una manera muy destacada la Diada de Sant Jordi, patrón de la comunidad y en la que existía la tradición de regalar en dicha jornada una rosa a todas las mujeres. Fue entonces cuando se introdujo la costumbre de regalar a los hombres un libro, la cual se ha mantenido hasta nuestros días.
En la 28ª reunión de la UNESCO, celebrada en París entre el 25 de octubre y 16 de noviembre de 1995, se acordó declarar “Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor” el 23 de abril de cada año, fecha en que coincidieron, en 1616, los decesos de Miguel de Cervantes, William Shakespeare e Inca Garcilaso de la Vega (según el dicta el punto 3.18 de la resolución allí acordada).
Destacar que un 23 de abril también nacieron y/o fallecieron otros ilustres escritores como Inca Garcilaso de la Vega, Teresa de la Parra, Maurice Druon, Halldór Kiljan Laxness, James Patrick Donleavy, Karin Boye, George Steiner, Jules Barbey d’Aurevilly, Josep Pla, Eugenio Noel, Edgar Neville o Manuel Mejía Vallejo (por citar unos cuantos).
ESTE AÑO SERÁ UN SANT JORDI MODESTO
La celebración de Sant Jordi es vista por libreros y floristas con mucha expectación pero pocas expectativas. El Ayuntamiento de Barcelona ha concedido 4.977 permisos para la venta de rosas y otros 758 para la de libros durante Sant Jordi, pero ninguno de los dos sectores que más se benefician de la fiesta espera un aumento en las ventas. Más bien han presentado previsiones similares a las de 2013. El sector del libro estima que durante la jornada venderá 1,4 millones de ejemplares y cifra en 18,4 millones de euros los ingresos que estos suponen. Para los libreros, la diada supone entre un 7% y 8% de la actividad anual, según estimaciones del gremio.
Por cada libro habrá unas cuatro rosas si se cumplen las previsiones de los floristas. Sant Jordi representa el 30% del total de rosas que se venden cada año en Cataluña. Mercabarna-Flor estima que se comercializarán seis millones de rosas en toda Cataluña este 23 de abril. El hecho de que la fiesta haya caído en un día laborable aumenta las posibilidades de ventas, ya que algunas empresas se suman a la tradición para agasajar a sus empleadas.
La conclusión es que el sector de los libros llega a Sant Jordi debilitado. El número de lectores creció un 3,4% en los últimos cuatro años, según un estudio del sector. Sin embargo, este avance no fue de la mano con la compra de libros, que cayó un 4,3% en los últimos tres años. El informe revela que cada día son más los que recurren a las bibliotecas (+3,4%) e Internet (+7,3%). Para los editores, la misión este 23 de abril es captar al público que lee de vez en cuando. Para lograrlo no hay favoritos este año, aunque el despliegue de la obra de Gabriel García Márquez, ante su reciente fallecimiento, podría influir al elegir un título, según los libreros veteranos.
Hay mucha variedad de títulos, por lo que se estima que las ventas queden este año más repartidas con predominio de la narrativa, los libros de historia, ensayo y actualidad política, según las previsiones del Gremi de Llibreters y el de Editors de Catalunya. A falta de claros vencedores en esta jornada, un indicador usado por ambos gremios es la base Libridata que gestiona la Fundació d'Audiències de la Comunicació i la Cultura (Fundacc), que con las ventas de entre el 7 de marzo y 13 de abril de 212 puntos de venta —129 librerías y cadenas de librerías y 83 hipermercados, el 50% del total— apunta algunas tendencias de lo que será la jornada.