Santuario felino en Fresno (California)

Por Nazarinasociacion

Cat House

Existe un increíble santuario felino en California llamado The Cat House on the Kings donde viven entre 500 y 800 gatos, así como treinta perros, en total libertad en un terreno de dos hectáreas y media totalmente vallado y una casa de casi 400 metros cuadrados que comparten con Lynea Lattanzio, la fundadora. Para cuidar de estos animales se necesita un millón de dólares anuales. “Al principio, cuando nos quedábamos sin fondos, ponía dinero de mi bolsillo, lo sacaba de mi plan de pensiones”, dice Lynea. “Pero ahora, todo mi plan no bastaría para alimentarlos durante seis meses”.

The Cat House on the Kings es el mayor santuario y centro de adopción de Estados Unidos donde los animales viven en completa libertad. Lynea Lattanzio y otras 25 personas se encargan de cuidar a los residentes con la ayuda de seis veterinarios. Los gatos enfermos disponen de una unidad veterinaria y de un pequeño hospital. Hay un espacio reservado a los gatos mayores y dos espacios especiales dedicados a gatitos, para criarlos y para mantenerlos en cuarentena. Asimismo, cuentan con dos puntos de adopción, uno en el mismo refugio y otro en Fresno.

Lynea vive para los gatos. En realidad, no tenía intención de dedicarse a esto. Buscaba una casa para volver a empezar desde cero. “Siempre había querido vivir cerca de un río”, recuerda. “Llamé a una inmobiliaria, y cuando vi el terreno decidí comprarlo, pero desconocía el tamaño de la casa. Está claro que estaba predestinada, si no ¿para qué me serviría una casa tan grande?” Y sigue diciendo: “Acabé llenando la casa de gatos, hasta el punto que debí irme a otro sitio”.

“Con tanto terreno creo que podemos llegar a cuidar de mil gatos”, explica. “Pero no crean que un día me desperté diciendo: ‘Oh, vaya, voy a tener mil gatos, ¡qué buena idea!’ No fue así, empezó con uno, pero siempre había sitio para uno más.” Y añade que, de pequeña, quería tener un gato, pero su madre nunca se lo permitió.

Todo gato que llega es esterilizado y vacunado, tiene un techo, un lugar donde dormir, comida y puede pasear libremente por la enorme parcela.

La fundadora también ha encontrado un método para ayudar a los gatos considerados como “inadoptables” por los refugios: por cada gato “inadoptable” que se lleva, el refugio debe encontrar un hogar adecuado para cinco de los suyos.

El santuario funciona únicamente a base de donaciones de particulares o de protectoras, no recibe dinero del estado de California. Sin embargo, propietarios de gatos de Arabia Saudí o de Hong Kong han mandado a sus gatos a Lynea para que los cuide a cambio de una cuota mensual. The Cat House on the Kings ofrece consejos a miles de personas en todo el mundo a través de su página web y tienen patrocinadores de países tan lejanos como Dinamarca y Australia.

La filosofía de The Cat House of The Kings es encontrar una casa para todos estos animales y, entretanto, darles un hogar temporal donde se sientan cómodos y estén bien atendidos. Desde su fundación hace 22 años, el santuario ha salvado a más de 24.000 gatos y 7.000 perros. Actualmente cuidan de unos 700 gatos, 12 perros y 5 cabras cuyo quehacer es cortar la hierba. Lynea Lattanzio ha conseguido algo maravilloso: fundar un auténtico santuario donde los gatos viven en total libertad mientras esperan a ser adoptados. No hay jaulas, y si nadie les adopta, seguirán viviendo con Lynea el tiempo que haga falta.

Además de algunas fotos, colgamos un enlace a un vídeo que vale la pena ver.

Por cierto, esta entrada está dedicada a Patricia, que sería la mujer más feliz del mundo si pudiera hacer algo así.

https://www.youtube.com/watch?v=R4u41ysH3eE