El santuario Yasukuni en Tokyo es uno de los lugares mas polémicos de Japón. Su construcción fue posterior a la guerra civil japonesa (Guerra Boshin) que tuvo lugar entre los partidarios del gobierno Tokugawa y los partidarios de la devolución del poder al emperador. Una vez terminado el conflicto se levanto el santuario para honrar el espíritu de los fallecidos en combate, pero solo a los ganadores ya que a los partidarios de Tokugawa se les considero enemigos del emperador.
Descubrí la existencia de este santuario cuando Japón y China entraron en polémica por temas de guerras pasadas. El motivo de la polémica aparte de unos libros de texto en los cuales no se hablaba de hechos sobre guerras del pasado, también era por las frecuentes visitas del anterior primer ministro de Japón, Junichiro Koizumi, a este templo. El alego que ofrecía sus respetos a los espíritus que descansan allí pero las autoridades chinas lo veían como apología al imperialismo japones.
Como llegar
El santuario se encuentra a unos 10 minutos de la estación de metro de Kudanshita, en la cual paran las linea de Shinjuku, Hanzomon y Tozai. Las estaciones mas usadas para enlazar con estas lineas serian Shinjuku para la linea de Shinjuku, Shibuya para la linea Hanzomon y Nihombashi para linea Tozai. Podéis combinar esta visita con la visita al palacio imperial ya que Yasukuni esta situado detrás del palacio imperial, aunque andando es un buen trozo.
El santuario
El santuario en si no destaca mucho. Es un santuario que esta muy bien conservado y cuidado, bastante sencillo y con pocos detalle como la mayoría de santuarios sintoistas. No suele haber mucha gente y el turismo suele ser mas japonés que occidental.
El camino al santuario cuenta con una gran avenida con varios Toriis . Es una avenida famosa por la cantidad de cerezos que hay, y mucha gente se acerca allí en primavera para verlos.
Avenida hacia el santuario (dirección opuesta)
En la entrada de esta avenida al templo nos encontramos con la estatua de Ômura Masujirô el llamado “padre” del ejercito japones moderno, en una estatua de bronce al estilo occidental la cual fue de las primeras en Japón.
Es en esta avenida también nos encontramos diversos monumentos conmemorativos como la fuente “Irei no izumi” una escultura con forma de fuente dedicada a los que sufrieron o murieron de sed.
Irei no izumi
Ya dentro del recinto del templo los monumentos memoriales son mas relacionados con el ejercito como el monumento a los famosos “kamikazes”.
O a las victimas de uno de los barcos de guerra japoneses.
Museo Yûshûkan
En el santuario de Yasukuni hay un museo dedicado a las guerras de Japón. El museo esta mas centrado en los eventos de la 2ª guerra mundial pero también hay algunas cosas de la Guerra Boshin. Allí encontraremos algunas katanas y armaduras viejas, ropas y material diverso, todos con su historia como un cuenco para el arroz de Iwo Jima, granadas ,ropa militar… entre los muchos objetos.
Las dos grandes atracciones del museo son un avión de combate japonés completo y un torpedo Kaiten, los torpedos suicidas que se usaron en la etapa final de la segunda guerra mundial. También hay una amplia selección de fotografías de soldados que lucharon, civiles… Eso si, sin entrar en detalle de todas las atrocidades que cometió el imperialismo japonés. Algo que ha hecho que llovieran mas criticas a este museo ya que podría interpretarse como que hace apología del imperialismo y nacionalismo japones.
El principal problema del museo es que algunas partes no cuentan con explicaciones en ingles. Con lo que da para pensar que o bien esta poco pensado para los turistas o quizá se sientan avergonzados por todo esto de puertas para fuera y que las explicaciones solo sean para que los japoneses conozcan un poco mas su historia. Como es común no se pueden hacer fotos en el interior.
El museo esta abierto todos los días del año de 9 a17 (17:30 de Abril a setiembre) y la entrada vale 800 yens.
Opinión personal y conclusiones
Yasukuni es una visita interesante pero con matices. Puede ser interesante por todo lo que significa pero también puede provocar recelo por la polémica que suscita. Podría equipararse un poco con el Valle de los Caídos de España con la gran diferencia que no se trata de una guerra civil con dos bandos, aun así forma parte de una pagina negra de la historia japonesa que no habría que olvidar para que no se repita.
Así que recomiendo la visita si tenéis varios días por delante en Tokyo y esta visita no os impide visitar otros lugares mas imprescindibles. O bien si estáis interesados en la segunda guerra mundial.
Jubilado en el santuario Yasukuni