La multinacional norteamericana Sara Lee obtuvo en el ejercicio fiscal 2010-2011, que concluyó el pasado 2 de julio, un beneficio neto atribuible de 1.287 millones de dólares (902 millones de euros), un 154% más en comparación con los 506 millones de dólares (355 millones de euros) que ganó en el ejercicio anterior, según informó la compañía en un comunicado, que destacó el impacto de la complicada situación en España en sus ventas en la división de panadería internacional.
Por su parte, la facturación de la compañía propietaria de marcas como Senseo, Pickwick, Marcilla o Bimbo alcanzó en su último ejercicio fiscal los 8.681 millones de dólares (6.088 millones de euros), lo que supone un 4,1% más que los 8.339 millones de dólares (5.890 millones de euros) que ingresó hace un año. En el cuarto trimestre de su ejercicio fiscal, Sara Lee obtuvo un beneficio neto atribuible de 111 millones de dólares (78 millones de euros), un 40,6% menos que los 187 millones de dólares (131 millones de euros) del mismo periodo del ejercicio anterior.
Asimismo, la facturación de Sara Lee, que tiene previsto dividir la empresa en dos compañías cotizadas diferentes que separarán su negocio en América del Norte de su división internacional a principios de 2012, aumentó un 8,7%, desde los 2.113 millones de dólares (1.495 millones de euros) hasta los 2.297 millones de dólares (1.610 millones de euros).
Complicada situación en España
Por otro lado, la compañía destacó que las complicadas condiciones macroeconómicas y de competencia en España, donde prevé vender su negocio Bimbo, han impulsado una caída del 8% en sus ventas netas en su división de panadería internacional. Así, señalo que en España fueron necesarias nuevas reducciones de precios para mantener cuota de mercado, lo que ha añadido presiones adicionales al margen a corto plazo.
Además, señala que la reestructuración de actividades para convertir su fuerza de ventas en operadores independientes evoluciona según lo previsto. En este sentido, señala que el proceso de venta de su negocio de panadería español, así como de bollería refrigerada en Francia, están en marcha y ya se han recibido “numerosas ofertas”. Sara Lee explica que estos negocios serán reclasificados como operaciones discontinuas en el primer trimestre de su ejercicio fiscal 2012.
Fuente: Cinco Días