El descarrilamiento se produjo poco antes de las 12:00 horas, por lo que cuerpos de emergencia se trasladaron al lugar para asegurar la zona. A pesar de que algunos vagones estaban suspendidos, Protección Civil no consideró necesario el cierre a la circulación.
Debido al peso y peligro que representan los vagones, se tomó la decisión de colocar polines de apoyo para los vagones, en espera de la llegada de grúas y maquinaria que permitan acomodar los carros con completa seguridad. Algunos vagones resultaron dañados.