Sé lo que viste el fin de semana pasado/CCLXIX

Publicado el 05 enero 2015 por Diezmartinez


Boyhood: Momentos de una Vida (Boyhood, EU, 2014), de Richard Linklater. Los 165 minutos de duración de esta cinta, filmada a lo largo de más de una década -de los 5 a los 18 años del actor protagónico, Ellar Coltrane- se van como agua. No pasa nada especialmente emocionante, sino el flujo de la vida misma. Aunque Coltrane es un actor un tanto opaco, Patricia Arquette, como la luchona y emproblemada mamá, y Ethan Hawke, como el extrovertido e inquieto papá, son la mayor fortaleza de la cinta. El hecho de seguir de manera natural el crecimiento de Coltrane y el envejecimiento de Arquette y Hawke -los kilos de más de ella, los kilos de menos de él- es un gimmick, por supuesto, pero es mucho más que un gimmick. De alguna manera, la película termina siendo no solo una notable pieza de ficción, sino una suerte de documental sobre el avance del tiempo en el rostro y el cuerpo de sus actores.Gloria (México, 2014), de Christian Keller. Entre la vulgaridad asumida de un Showgirls (Verhoeven, 1995) y los clichés melodramáticos del típico women's film, esta dispareja pero siempre visible biopic de Gloria Trevi brilla en sus momentos musicales y cada vez que Sofía Espinoza está en la pantalla. O sea, casi siempre. Mi crítica en el Primera Fila del viernes pasado.Corazones de Hierro (Fury, EU-GB-China, 2014), de David Ayer. Estamos en abril de 1945, en tierras alemanas, a unas semanas de la rendición del ejército hitleriano que, de todas formas, sigue luchando ya en actitud suicida. Un quinteto de soldados liderados por el duro y eficaz sargento Collier (Brad Pitt) avanza en un tanque Sherman apodado “Fury”, el título en inglés de la cinta.Ayer se muestra perfectamente apto para dirigir esta violenta, emocionante y muy emotiva cinta bélica con un reparto de primer nivel en el que destaca, además de Pitt, el jovencito Logan Lerman en el papel de un taquígrafo enviado al frente. La curva de aprendizaje de este muchachito en pleno fragor de la guerra resultará ser el corazón dramático del filme.