Cuando llegan a la isla constatan que el pueblo está completamente deshabitado. La mayoría de los visitantes llegan en barco, pero solo durante la estación estival. Una vez en tierra, el capitán les promete volver en una semana y les advierte de que el único lugar donde hay cobertura es en la cima de una montaña cercana. El entusiasmo inicial por la impresionante belleza del paisaje y la paz que se respira en el lugar dará lugar al desasosiego cuando comienzan a producirse una serie de extraños sucesos. Pronto los personajes se darán cuenta de que no están solos en la casa.
En un pueblo al otro lado del fiordo, Freyr, un joven psiquiatra, investiga el suicidio de una anciana que había sido su paciente. La anciana parecía estar obsesionada con la muerte del hijo de Freyr, Benni, que unos años antes había desaparecido sin dejar rastro.
Un par de días me duró esta novela que transcurre en las frías tierras de Islandia. Dos son las líneas argumentales de esta historia y dos los lugares en las que se desarrolla.
En la pequeña y solitaria aldea de Hesteyri, encontramos a Garðar, su mujer Katrín y Lif, una amiga de ambos que se acaba de quedar viuda. La idea que tienen en mente es renovar una vieja casa y convertirla en un refugio para hospedar a muchos de los senderistas que se animan a recorrer Hesteyri durante la temporada de verano. La casa elegida, sin embargo, parece que tiene una oscura historia y esconde mucho más de lo que a simple vista parece.
Al otro lado del fiordo, en Ísafjörður, encontramos a Freyr, que ejerce de médico y psiquiatra y que en ocasiones también asesora a la policía. Le han pedido su opinión profesional sobre el asalto a una escuela, lo que le hace recordar la desaparición (sin resolver) de su propio hijo y además, también investigará el suicidio de una antigua paciente, en unas circunstancias muy extrañas.
La novela desde luego, está llena de intriga y de momentos bastante espeluznantes, sobre todo los capítulos que transcurren en Hesteyri. Desde el instante en que los protagonistas desembarcan allí, comienzan a ocurrir cosas que no tienen explicación, aunque por supuesto ellos intentan justificar todo lo que no entienden de cualquier forma, por muy inverosímil que sea.
También ayuda a crear esa atmósfera de desasosiego, el entorno abandonado y desolado en el que se encuentran, ya que es una aldea en la que ya no vive nadie, tras el cierre de la factoría ballenera que daba trabajo a sus habitantes y que solamente recibe visitas en las temporadas de verano.
A simple vista parece muy difícil que consigan reparar todo lo que tienen en mente y crear el ambiente agradable y acogedor que pretenden. La falta de electricidad, que les obliga a iluminarse con velas y que les impide cargar un móvil, el frío e implacable clima que deben soportar y que parece imposible quitarse de encima, como si toda la leña del mundo no fuera suficiente para conseguir calentar al menos una habitación, ese olor a podredumbre que cuando menos se lo esperan les azota la nariz, y esas "visiones" que todos, en mayor o menor medida perciben, rematan un cúmulo de sensaciones con las que tendrán que sobrevivir una semana, que es cuando el barco que les llevó hasta allí volverá a buscarlos (siempre y cuando el tiempo lo permita, claro).
Es verdad que al encontrarse en un lugar que durante el invierno está totalmente abandonado, llega un momento en que lo que allí ocurre empieza a ser algo repetitivo y monótono, aunque seguro que no opinaríamos lo mismo, de estar en el pellejo de los personajes.
"Hesteyri" más o menos como se describe en algún momento de la novela
Mientras que los protagonizados por el psiquiatra son más amenos, esto es lógico porque intervienen más personajes, hay más sitios donde desplazarse, existe la posibilidad de contactar con más personas, mientras que en Hesteyri el ambiente es mas claustrofóbico."Sé quién eres" es una novela con personajes muy interesantes, pero sobre todo creíbles, con problemas reales que intentan solucionar. Es una historia llena de planes cargados de buenos propósitos, que se van torciendo sin remedio desde el momento en que los protagonistas llegan a Hesteyri, logrando crear una atmósfera de angustia creciente en ellos y en el lector, combinada con una investigación policial que de algún modo acabará conectada con ella, dando lugar a un muy buen final (que no vi venir... ¡bien!).
Intriga, tensión, misterio, fantasmas y sí, algo de "miedito", es lo que ofrece esta novela desde el principio. Una buena opción para conocer el estilo de esta autora, ya que es un libro auto-conclusivo, aunque Y
rsa Sigurðardóttir es más conocida por la serie de novelas protagonizadas por los abogados Þora y Matthew (”El último ritual”, ”Ladrón de almas” y ”Ceniza”)