Secretos del arenal

Publicado el 13 diciembre 2014 por Aleon @Aleonpizarro
de Félix G. Modroño.


Título: Secretos del ArenalAutor: Félix G. Modroño.Editorial: Algaida Editores, 2014.Páginas: 381.
Resumen oficial.
El voluptuoso mundo del vino ha unido a Silvia y Mateo en una relación tan intermitente como apasionada, donde nunca hay preguntas ni tampoco respuestas. Pero ella sigue atormentada por el dolor de hace muchos años: en 1989 el cadáver de su hermana mayor apareció en el monte Artxanda, salvajemente mutilado, y desde entonces el asesino sigue libre, sin que las investigaciones —primero de la Policía Nacional, y luego de la Ertzaintza— hayan logrado sustanciales avances.
Un día, Mateo recibe el correo electrónico de una desconocida que le propone leer la novela Secretos del Arenal: una historia de intrigas, venganza y supervivencia situada en la Sevilla de posguerra, una ciudad acosada por el hambre, la miseria y la represión política. Mateo no sabe que es la propia Silvia quien le manda ese correo, y por supuesto desconoce qué claves se esconden tras las lectura de esa novela.
En la más reciente novela de Félix G. Modroño, galardonada con el XLVI Premio Ateneo de Sevilla, el destino parece entretejer las historias de dos mujeres, en dos ciudades diferentes separadas por más de mil kilómetros, y con casi medio siglo de diferencia. 
Quizás el Arenal —el de Bilbao o el de Sevilla— aún oculte las claves de un misterio nunca resuelto, y quizás un libro contenga las repuestas a las preguntas que nunca se formularon.
Impresión personal.
Precisamente yo no soy una forofa de los Premios, ni de los literarios ni de los de otra índole, en parte porque ya me he llevado más de un "chasco" con alguno que otro, en especial con los Planeta, con los Nobel y en cine con los Óscar. Por eso no he buscado este libro porque haya ganado un Premio sino porque andaba esperando que Félix volviera a publicar después de haber leído La ciudad de los ojos grises, un libro que me maravilló y que me dejó la imagen de un Bilbao tan misterioso como cautivador; un libro genialmente escrito con un lenguaje precioso y una estructura muy ágil.
Secretos del Arenal ha vuelto a llevarme en volandas por dos ciudades mágicas unidas por la historia de dos mujeres excepcionales en busca de justicia: Bilbao y Sevilla. Si bien, en esta ocasión, la ciudad de Bilbao se dibuja con menor detenimiento que en el libro anterior, los ambientes ligados al mundo del vino vienen a suplir perfectamente ese detalle. Personalmente, siento una sana envidia de todos aquellos que son capaces de captar esa cantidad de olores y sabores en una copa de vino. Yo, por mucho que lo he intentado en diferentes catas, sólo consigo valorar si me gusta o no me gusta por su nivel de aspereza. Y eso que lo que bebo habitualmente es vino. Toda esta parte del libro donde tanto Silvia como Mateo se relajan alrededor de unas copas de vino, me han encantado.
Por otro lado, he visitado Sevilla con Olalla y he vuelto a callejear por esas callejuelas del centro donde siempre me ha parecido que en cualquier rincón vaya a salir un hombre embozado. He olido el azahar de los naranjos en los patios y he visto de nuevo a las mujeres de mantilla en la Semana Santa. Me resulta fácil, claro, tengo a Sevilla muy cerca y me asomo muchas veces por sus calles. Pero sentir esos ambientes y no sólo verlos, sólo Félix ha conseguido traérmelos a mi sofá con su libro en las manos. Ese lenguaje y esa manera de decir las cosas que tiene Félix te hace tocar de cerca lo que cada personaje toca, oler lo que huele y hasta escuchar algún que otro grillo en las paredes encaladas de la ciudad andaluza.

La Madrugá-Sevilla

Si los ambientes me han parecido un punto fuerte, las dos historias y la forma en la que se entremezclan no ha sido menos. Dos historias en dos momentos temporales diferentes, algo que a mi personalmente me encanta. La verdad es que he estado desconcertada gran parte de la novela con la historia de Olalla en Sevilla, esperando ver cada vez que me tocaba leerla una pequeña pista que me conectara con la historia de Silvia en Bilbao, una historia bien clara y definida y con un objetivo nítido. Desde luego, es una historia redonda, bien cerrada y perfectamente hilvanada que no deja de sorprenderte. Dos mujeres haciendo justicia cuando la justicia no responde. Una historia nuestra de cada día, de incompetencia del sistema que lo único que hace bien es contar cadáveres femeninos como el que cuenta pollos en un matadero. Dos mujeres valientes que evolucionan día a día para convertirse en dueñas de su destino y conseguir vivir sin miedo. Me han encantado estas dos mujeres y el personaje de La Madrid, mujeres separadas por el tiempo, la cultura de la época y el espacio, pero todas ejemplares a su manera. En especial me ha hechizado Silvia, una mujer con la que me identifico en muchas cosas pensadas, sentidas y vividas:
Siempre disté mucho de ser perfecta. Mi fama de díscola se me impuso desde niña como el sambenito de un condenado por la Inquisición. Y si mi rebeldía no me ha causado excesivos problemas, fue meramente porque mi discreción la superaba. Reconozco que, con el tiempo, he interiorizado mi creciente insumisión hacia el mundo. Una no puede ir aireando sus pensamientos si cuestionan la sociedad en la que vive. Me estomagan aquellos que opinan en función de su militancia política, religiosa o incluso deportiva. Me resulta irrisorio que se siga hablando de izquierdas y de derechas, definiciones que nacieron de una mera manera de sentarse en las asambleas. Me entristece que millones de personas vean a diario programas basura de la televisión y que haya gente que se enorgullezca de no haber leído jamás un libro. No puedo con la injusticia, con los fanatismos, ni con la intolerancia. Me revienta la mala educación y la estupidez, por no hablar de la hipocresía.

No sabría decir en que género se podría catalogar este libro. Realmente es una novela dentro de otra novela por lo que Silvia hace con su manuscrito. Por esta parte, tiene una buena dosis de metaliteratura que me ha gustado mucho sobre todo porque he estado tan intrigada con esta historia como el propio personaje de Mateo. No tenía claro adonde quería llevarme Silvia y que relación guardaba con su propia búsqueda.
También tiene toques de novela negra porque en la historia actual hay unos asesinatos, una investigación y un desenlace final aunque no se nos hace partícipe apenas de la investigación de la policía, más allá de la larga espera de justicia de la propia familia de las víctimas.
Una novela histórica, casi costumbrista, en toda la parte sevillana que vive Olalla y Martín en la época de la posguerra española, una época en que la que, al margen de las penurias más básicas de la población, se continúa con la persecución y el ajusticiamiento de todas aquellas personas sospechosas de atentar de cualquier modo contra el régimen de Franco.
Finalmente, y no por incluirlo al final de esta reseña es menos importante, una de las bazas más fuertes de esta novela y de otras de este autor es la propia manera de escribir de Félix G. Modroño. Félix utiliza un lenguaje precioso y preciso, lleno de frases cautivadoras que, más que la historia que está relatando, no te dejan soltar el libro. Una forma de escribir que se siente a la vez que te facilita la lectura por su sencillez y el uso de un vocabulario claro y preciso.
En conclusión, una novela que recomiendo de todas todas y por todo. Nadie debería obviar a este autor porque se pierde a uno de los mejores escritores del panorama nacional. Ésta es la última, pero las anteriores tampoco tienen desperdicio alguno.