Al abrirlo lleva un plástico protector que debes volver a poner después de cada uso para que no se derrame el producto y que se mantenga el máximo tiempo posible. Al sacar ese plástico contiene una esponja negra con una ranura en el centro que será donde debemos introducir el dedo para desmaquillar la uña.
Ahora vamos con el mecanismo. Es muy sencillo. Introducimos el dedo en el centro de la esponjita y damos unas cuantas vueltas al bote. Sacamos la uña y... milagro! Ni gota de esmalte de uñas.Lo mejor de todo es que limpia perféctamente también la cutícula. Se acabó el frotar con el algodón y mancharnos todo el dedo de restos de pintauñas. Mirad!
No sé el tiempo que durará este producto pero por la comodidad y la eficacia, para mi vale la pena comprarlo. Además tiene un precio buenísimo. La versión anterior creo que me duró un mes más o menos, pero ya os digo que no se parecía ni de lejos a este quitaesmalte.
El olor es similar al del quitaesmalte de toda la vida pero un poquito más suave. Recordad que los quitaesmaltes son productos inflamables, así que no los guardéis cerca de focos de calor. Os dejo una foto con los ingredientes porque sé que a algunas os gusta mirar esto.
Y vosotras, ¿Habéis probado este producto?, ¿Os gusta?
Besos.
María.