Seguro de supervivencia

Publicado el 10 enero 2011 por Jvilla

Raúl Rentero - La onda expansiva


Muchos de ustedes lo recordarán. Tras el partido de Paraguay en el Mundial, más conocido como “el del penalty de Casillas” una reportera a pie de césped preguntó al portero (sin beso) cómo había adivinado la intención de Cardoso en la pena máxima. E Iker, siempre humilde, confesó: “El penalty lo ha parado Pepe”. Reina, por supuesto. Preguntado el cancerbero del Liverpool en turno de apelaciones, éste respondió: “He visto cientos de penalties de Cardoso y en momentos críticos siempre los lanza a su derecha. Es su seguro de supervivencia”
Profeta dixit. Estoy convencido de que, preguntados en cámara parlamentaria los 22.500 aficionados de la Rosaleda, los componentes del cuerpo técnico, palco, autoridades y los 11 futbolistas del momento H, por la manera en que el Athletic podía empatar el partido del sábado, todos hubieran respondido de la misma manera: con un balón lanzado al área en trabuquete y cabeceado por Llorente o por Javi Martínez. Dicho y hecho. Ni avisados por burofax.
Es la magia del fútbol que a tantos encandila. La matemática no sirve en el mundo de la pelotita. El problema es que la defensa malaguista, con su Demichelis (que viene, por cierto, con las cachas del Cid Campeador), no sólo tropieza dos (¿o cuántas?) veces con la misma piedra sino que parece que lleva los bolsillos llenos de ellas, de piedras me refiero, para colocarlas al empeine cuando toca. Por lo demás, buen partido del Málaga, C.F. que no mereció perder y punto que, vistos los resultados de la zona de pomada, no está mal del todo. Siempre la botella medio llena. Así ha de ser. Si nos dicen a priori que el equipo va a sumar cuatro de los seis puntos en liza contra Sporting y Athletic de Bilbao, lo firmamos con pluma de ganso. Quedémonos con la matemática, la que no sirve en el mundo de la pelotita.
Suelo echar un ojo a la instropectiva periodística del rival, más que nada, porque en el mundo de las subjetividades, que un malaguista de caña y bocadillo diga que los blanquiazules no merecieron perder, lo pongo cuanto menos en cuarentena. Pero si la prensa rival piensa, crónica mediante, el idem acabo aceptando barco como animal de compañía.
http://www.canalathletic.com/noticias/2011-01-09/javi-martinez-rescate-20110109.html
Noticia por cierto a la que, como verán, algunos enconados malaguistas se han molestado en enviar comentarios para defender con alfanje y juba bereberes al jeque de los millones. A lo William Wallace, vamos, más conocido como “el de Braveheart”. Entiendo, por la flema patriótica que nos toca, que ha llegado a escocer el bombardeo mediático de aquello de “cantera contra cartera”. A estos aficionados de tecla y contrapunto recetaría una aspirina o calmante vitaminado. Pues así correrán las bulas, me temo, hasta el final de los tiempos del califa.
De todos modos, aceptado queda, si El Correo bilbaíno lo constata. Lo de que el Málaga tuvo mala suerte. Del mismo modo que no aceptamos Rondón como perro de presa. Al Málaga le falta gol y que tenga que venir el de la Evangelina desde Munich a cabecear un córner empieza a oler a chamusquina.
Por lo demás, aferrémonos a lo del seguro de supervivencia, que en realidad iba por otros derroteros. El Barça, al que denostan por aquello de la Qatar Fundation, se las está viendo y deseando para renovar a Dani Alves. Después de no sé cuántas reuniones la última oferta de Rossell para palmear los bolsillos “avaros” del brasileño ha incluido una cláusula así llamada: seguro de supervivencia, que viene a ser un plan de pensiones que el Barça ingresaría en una entidad de crédito para que el lateral culé la cobre al finalizar su contrato (con sus buenos intereses de rigor, claro). Mucha cantera pero, ya ven, escrito el asunto en balance, hasta los Todopoderosos acaban en manos de Mapfre, Allianz o Mutua Madrileña (que sería el rizo rizado). Gozemos, pues, de nuestra cartera mientras podamos.
Bien nos vendría, volviendo a la trocha que nos trajo hasta aquí, tener un seguro tal firmado para lo que viene. Barcelona y Valencia, siguientes apeaderos. Esperemos que, como el otro James Bond, salgamos vivos de Dante´s Peak. Y que el tránsfer de Baptista llegue para el partido del Zaragoza. Tiempo hay. Se supone.
Mientras tanto, disfrutemos de la semana que nos toca. Jugamos contra el Peptim y eso al menos hará que el Málaga exista en Barcelona y Madrid. Aunque sea como puro pensamiento platónico.