Seis formas de tomar decisiones en equipo

Por Joseluisp

La primera forma de tomar decisiones en un equipo consiste en hacerlo de manera individual. Simple y llanamente, la persona responsable del resultado es la encargada de tomar la decisión. Se recomienda como norma para aquellas decisiones en las que consultar a los demás puede dilatar el tiempo de la decisión. Sin embargo no es la más adecuada cuando la decisión tiene tal impacto sobre el resto del equipo que hace aconsejable consultarles.

En segundo lugar, la regla de la minoría consiste en encomendar la decisión a un subgrupo dentro del equipo, llámese comité, comisión o task force. Es una fórmula muy eficaz cuando un grupo concreto de personas posee la información suficiente para tomar la decisión, aunque se corre el riesgo de que esta comisión llegua a plantear una decisión que el resto del grupo no apoya.

La regla de la mayoría consiste en poner en marcha un proceso democrático por el que los miembros del equipo puedan votar la decisión. Es perfecta para los grandes grupos, sin embargo es preciso tener en cuenta que una mayoría no siempre garantiza la implantación eficaz del acuerdo, en la medida que algunos de los miembros del equipo pueden mantenerse indiferentes ante ella o desarrollar una resistencia activa o pasiva. Además, si el grupo es pequeño algunos expertos aconsejan una mayoría culaificada (75%) respecto a una mayoría simple (50%).

La cuarta regla, la del consenso, puede resultar muy efectiva, pues los miembros del grupo comprenden la decisión y se preparan para apoyarla aunque su punto de vista inicial fuese diferente. Esto hace que su implantación sea muy eficaz. No obstante, el consenso requiere una cantidad de tiempo del que no siempre disponemos.

Finalmente, el consenso unánime es la fórmula más efectiva de todas pues conlleva que todo el grupo apoya la decisión. Sin embargo, aunque es posible lograrlo en decisiones simples o que collevan urgencia, no estan sencillo alcanzarlo en decisiones complejas.

Existe una sexta forma de tomar decisiones. La decisión por falta de decisión. Se corresponde con el patrón por el que uno de los miembros del equipo sugiere una idea, nadie le responde y se adopta la decisión a pesar de la ambigüedad de la respuesta. Puede facilitar el proceso de tomar decisiones pero es posible que su implantación sea complicada.

Jesse Lyn Stoner considera que la toma de decisiones en equipo es un proceso situacional. No hay una fórmula perfecta para hacerlo sino que, por el contrario, existen diferentes maneras de hacerlo. Cada una es la más adecuada para cada situación en función de la información de la que dispone cada miembro del equipo, de su urgencia, del impacto sobre los miembros del equipo, o de su repercusión en la misión.

Para ello necesitará de un radar. Una sensibilidad que le permita evaluar el alcance de la decisión a tomar y precisar cuál es la fórmula más adecuada para resolver. Otra competencia en la que trabajar. Suerte.