Seis playas para visitar en Tenerife

Por Mundoturistico

Las playas de Tenerife, aunque no están mal, no son de las mejores en las que he estado. Seguramente las supere la gran mayoría de las hay en Fuerteventura, donde aún no he ido, y en el caso de los lugares que sí he visitado, Ibiza estaría por ejemplo por delante –y algunas del Norte o Cádiz en cuestión de belleza-. Pero aún así, con buen tiempo, casi nadie se olvida de descansar un rato en un arenal y si se puede, darse un chapuzón. Y alguna merece bastante la pena en Tenerife. Además, algunas tienen un paisajes de primera.

Otro aspecto importante que influyó bastante en mi percepción sobre sus playas es que la gran mayoría de las del sur y Las Teresitas (un arenal que por lo que me contaron se realizó para que la capital tuviera su playa, ya que está situada a unos ocho kilómetros) son artificiales. Esto es, creadas con arena del Sáhara y en algunos casos, delimitadas por cordones de piedras creadas humanamente. Aunque muchos de estos arenales además de ser bonitos, son muy agradables para el baño, tengo que reconocer que no los vi de la misma manera al enterarme. Aunque supongo que es porque tampoco hacía demasiado calor y yo prefería pensar en conocer la isla.

En la selección que sigue, hay algunas en las que estuvimos, pero también otras en las que no por diferentes razones –fundamentalmente por falta de tiempo-. No obstante, en más de una ocasión nos las recomendaron, además gente local, por lo que creo que su inclusión está más que justificada. Allá van.

Playa de las Teresitas, en San Andrés

Más allá de su autenticidad, como hemos mencionado, esta playa es bonita y tiene un paisaje espectacular para estar situada a tan solo ocho kilómetros de Santa Cruz de Tenerife. En frente de altas montañas, el baño es muy agradable y gracias al piso de la arena, se logran agunas algo cristalinas. Allí tomé mi primer baño playero de 2015, pues la temperatura del agua era buena y aunque no había mucha más gente en el agua, hacía un buen día para tal fin. Después, tomamos algo en el bar, que tiene ambiente y música para hacer más animado el día. En ese momento, no encuentro mejor plan que tomarme una cerveza en la playita. Luego fijándome poco a poco el ambiente es un poco adolescente, pero aún así, para un rato está muy bien.

Playa de El Médano

Una de las playas del sur con arena natural es la situada en la localidad de El Médano. Esta abarca un amplio arenal que va desde la plaza central del pueblo (muy animada para tomarse algo y de ambiente local), hasta el montículo que la hace tan reconocible y que aparece en la foto que sigue.

El principal problema de esta playa es el viento que corre, que hace que te entre el frío y te queden pocas ganas de darte un baño. Para ello, hay una zona abrigada donde la plaza y quizás con algo más de temperatura me hubiera animado. No es el caso. No obstante, para otro tipo de viajero, aquellos que buscan el viento, el panorama es ideal en este pueblo. Amantes del kitesurf y del windsurf pueblan el lado de la playa que está al lado de la montaña y encuentran en este rincón el más conocido de toda la isla para la práctica de los deportes acuáticos de viento.

Playa del Duque, en la Costa de Adeje

La Costa de Adeje es un conjunto de pueblos que hay en el sur de Tenerife y que cuentan con buenas playas, aunque artificiales, y que está bastante masificado. Cuando nosotras estuvimos –en el mes de marzo y a una hora tardía- no había problemas de gente, pero supongo que en pleno verano será otra cosa. Fuimos por recomendación a esta playa, pues un lugareño nos dijo que era la mejor de la zona y la verdad es que no nos defraudó nada. Lo que destaco de ella es que en uno de los extremos tiene una pared de piedra que la hace muy encantadora y en esa zona, las aguas son claras y tranquilas.

Aunque hay algo de construcción, la verdad es que los resorts están en esta playa bastante bien integrados y las montañas al fondo hacen que aún siga sumandos puntos. Nos quedamos a ver el atardecer y cada minuto, me gustó más. A veces hay que saber elegir el momento para ir a los sitios y aunque esto no fue enteramente buscado, al final acabó resultando un gran momento. Hasta me bañé.

La Pinta, en la Costa de Adeje

Otra de las calas que visitamos en nuestro viaje fue La pinta, de nuevo en la Costa de Adeje. En este caso, una playa algo más pequeña pero sumamente acogedora nos recibió. Al lado del puerto deportivo de Puerto Colon, me la imagino bastante masificada también en verano y en este caso el turismo –restaurantes y puestos de souvenirse- se dejan notar en mayor medida. Claro que esto en ocasiones interesa más y tiene un lindo paseo para continuar viendo el panorama de esta zona.

Playa Diego Hernández, en la Costa de Adeje

Diferente a las dos anteriores por tener que hacerse un camino a pie para llegar a ella, la playa Diego Hernández, fue una recomendación que nos hicieron dos personas que vivían en la zona. Aunque no fuimos porque no tuvimos tiempo, insistieron en su encanto, la importancia de no compartirse con mucha más gente y las aguas cristalinas de las que se podía disfrutar –esto nos lo mostraron hasta con fotos y la verdad es que tenían muy buena pinta-. Aunque no lograron ponerse muy de acuerdo, el camino llevaría entre y 20 minutos y según uno de ellos, no es fácil. Aunque yo soy de la opinión de que en ocasiones merece la pena el esfuerzo, por lo que dijeron se debe estar en un mínimo de fuerza física para llegar.

Para llegar, sus indicaciones fueron las siguientes: se parte de la localidad de La Caleta y se toma un camino. Tras pasar por otra playa rocosa llamada Los Morteros, se llegaría al destino. Conocida también como “la playa de los hippies”, por lo visto personas de vida libre pueblan alguna cueva próxima al lugar. Debe ser muy pintoresco. Qué pena no haber ido.

Como no he encontrado una foto libre de derechos, adjunto un vídeo sobre el lugar:

Playa de Taganana, en el norte

Otra playa que no visitamos a pesar de que nos lo dijeron en varias ocasiones –solo pudimos disfrutar de cinco días en Tenerife-, fue la de Taganana. Situada como a mí me gustaba decir, al norte del norte, es decir, en el extremo este de la isla, estaba un poco a desmano y desde el sur, eran muchos kilómetros para llegar. Abrupta y enclavada en un paisaje rocoso, debe ser una playa especial por lo salvaje. Solo puedo juzgarlo por la foto y los comentarios de la gente. De arena negra, el mar no debe ser el mejor del mundo para darse un baño, aunque, quién sabe. También leo que es buena para la práctica del surf. Se quedó apuntada para la próxima visita. Espero que vosotros, en cambio, podáis conocerla si os convence.

Si queréis conocer más sobre mi viaje a Tenerife, os invito a leer el post donde contaba todos los secretos del viaje.