Selección de acuarelas de flores - Flowers - watercolors

Publicado el 05 enero 2013 por José Garrido Herráez

Laurentino Martí

   Argumenta Cervantes en el prólogo al Quijote que, según dicen, tuvo que escribirse a sí mismo, a falta de quien se prestara a componérselo:
"Desocupado lector, sin juramento me podrás creer que quisiera que este libro, como hijo del entendimiento, fuera el más hermoso, el más gallardo y más discreto que pudiera imaginarse. Pero no he podido yo contravenir al orden de naturaleza; que en ella cada cosa engendra su semejante. Y así, ¿qué podrá engendrar el estéril y mal cultivado ingenio mío, sino la historia de un hijo seco, avellanado, antojadizo y lleno de pensamientos varios y nunca imaginados de otro alguno, bien como quien se engendró en una cárcel, donde toda incomodidad tiene su asiento y donde todo triste ruido hace su habitación? El sosiego, el lugar apacible, la amenidad de los campos, la serenidad de los cielos, el murmurar de las fuentes, la quietud del espíritu son grande parte para que las musas más estériles se muestren fecundas y ofrezcan partos al mundo que le colmen de maravilla y de contento. Acontece tener un padre un hijo feo y sin gracia alguna, y el amor que le tiene le pone una venda en los ojos para que no vea sus faltas, antes las juzga por discreciones y lindezas y las cuenta a sus amigos por agudezas y donaires. Pero yo, que, aunque parezco padre, soy padrastro de Don Quijote, no quiero irme con la corriente del uso, ni suplicarte, casi con las lágrimas en los ojos, como otros hacen, lector carísimo, que perdones o disimules las faltas que en este mi hijo vieres; y ni eres su pariente ni su amigo, y tienes tu alma en tu cuerpo y tu libre albedrío como el más pintado, y estás en tu casa, donde eres señor de ella, como el rey de sus alcabalas, y sabes lo que comúnmente se dice: "que debajo de mi manto, al rey mato". Todo lo cual te esenta y hace libre de todo respecto y obligación; y así, puedes decir de la historia todo aquello que te pareciere, sin temor que te calumnien por el mal ni te premien por el bien que dijeres de ella".

Laurentino Martí

   Viene al caso la cita de Cervantes porque, a falta de dos meses para que mi blog cumpla dos años, empieza a abrumarme tanto la cantidad de visitas recibidas (unas 18.000 mensuales), como el saber quiénes lo leen. De hecho llevo un mes paralizado, intentando reflexionar sobre la forma de darle si no una mejor organización, al menos alguna. Es un blog poliédrico donde quien lo escribe salta de un tema a otro, movido por sus impulsos, interes y amores: de las acuarelas a las cimas de San Odón; de la música a la epístola, del convento a la sala de exposiciones, de pincharse con una plumilla de Gillott a mancharse con una nueva tinta...   En fin. Después de darle muchas vueltas, he llegado a la conclusión de que no tiene remedio. Releyendo el prólogo de Cervantes me he consolado. ¿Qué cabría esperar?

Laurentino Martí

Laurentino Martí

   Tema central del blog es la acuarela, cosa que me produce tantos placeres ajenos como frustraciones propias. A ella dedico esta entrada, para mi bastante especial, monográfica de flores y con presencia de algunos de los mejores pintores actuales que conozco.

Laurentino Martí

Geoffrey Wynne

La entrada de hoy es muy sencilla y, a la vez, muy costosa de hacer para mi. Llevo años buscando, analizando, estudiando y recopilando acuarelas. Gracias a los distintos foros y lugares de internet, ahora tenemos acceso a infinidad de ellas, lo que supone una oportunidad y un privilegio inimaginable hace pocos años. Tenemos una exposición en casa cuando queramos.

Laurentino Martí

   Bien es cierto que no es lo mismo ver una obra en la realidad que en la pantalla del ordenador, a tamaño reducido, con escasa calidad de la fotografía a veces. Es mucho lo que se pierde. En ocasiones el color  muestra variaciones en los tonos respecto a la obra original, de la que se pierden matices, texturas y detalles y demás está argumentar razones que dejen claro que lo que hay que hacer es visitar exposiciones y ver las obras en vivo. Y a quien la economía se lo permita, comprar. Adquirir aquella obra con la que queramos convivir, la que deleite nuestra vista todos los días desde un lugar preferente de nuestra casa   Para mi es ése el mejor criterio, si no el único. Otra cosa sería entrar en el aspecto especulativo que tanto daño ha hecho al arte. Lo compro porque mañana valdrá más, aunque no esté dispuesto a poner tal engendro encima de la chimenea. No es el caso de ninguna de las acuarelas que así se incluyen.

Geoffrey Wynne

Geoffrey Wynne

  Desgraciadamente, no me puedo permitir el lujo de tener en casa ninguna de las maravillosas acuarelas que se muestran en esta entrada o en otras de mi blog, salvo las que yo pueda pintar, sabiendo que, aunque viviera mil años, no haría algo de tal altura. Porque no es fácil. Hay obras que, nada más contemplarlas, incluso los profanos intuyen que crear algo así es cosa de unos pocos elegidos. Viendo otras, aparentemente más sencillas, algún incauto puede considerar que están al alcance de cualquier pintor aplicado. Craso error. Pasando del dicho al hecho, con los pinceles en la mano, esta difícil técnica pondrá a cada cual en su sitio. Incluso lo que teníamos por más sencillo se revelará imposible.

Geoffrey Wynne


Geoffrey Wynne

Guan Weixing

   Lo que digo puede resultar desalentador, y no es mi intención desanimar. Al contrario, en este blog se intenta mostrar hasta qué punto la acuarela no tiene límites, dejar ver distintos pintores y diversas formas de aprovechar los recursos que ofrece esta difícil técnica pictórica. También hablamos de cómo este río ha desembocado en la acuarela actual, a la que algunos llegaron hace cien años mientras otros, por ignorancia o por simple esclerosis facial, dolencia frecuente en el gremio, como nuevo presentan lo que ya aburría en 1850.

John Yardley

John Yardley

  Nunca se muestran obras pintadas con otros medios, salvo dibujos con tintas, plumillas, o lápiz. Pero no óleo o acrílicos. Es una pequeña venganza en pago al desprecio de quienes han querido que la acuarela se considere un arte menor. No lo es. Viendo cualquiera de las obras de esta entrada, puede uno imaginar qué serían capaces de hacer con óleo quienes han pintado estas acuarelas. No han tenido en ellas oportunidad de rectificar. En una acuarela uno casi puede ver la mano del artista retirándose después de dar una pincelada. Se adivina el gesto, irreversible, definitivo, sin vuelta atrás. Si el color obtenido no es el adecuado, no hay corrección ni superposición que lo modifique. Mal admite la acuarela rectificaciones, dudas y afeites

Yuko Nagayama

Yuko Nagayama


Yuko Nagayama

   Algunos pintores son especialistas en flores, como Yuko Nagayama o Cembranelli; otros sólo ocasionalmente las pintan aunque lo hacen con su habitual genio y de forma inconfundible. Que un pintor consiga que una obra sea reconocida como suya nada más verla, es un  logro envidiable. Ocurre con Laurentino Martí y Cembranelli, con Geoffrey Wynne y Nagayama. En ellos vemos diferentes paletas, estilosdirectos y gestuales o más minuciosos y elaborados, especialmente por las escenas que componen, incluyendo más elementos o dando otro paso en el nivel de terminación. Distintas maneras de pintar, todas geniales.

Fabio Cembranelli


Fabio Cembranelli

Fabio Cembranelli


   Para ofrecer otros enfoques de este tema, se muestran aquí algunas de las acuarelas que, casi a diario, selecciono y recomiendo en facebook. Muchas de ellas son de pintores orientales, tanto de los que siguen más de cerca las tradiciones pictóricas chinas o japonesas, como los que se van apartando de ellas, conservando un dominio del trazo, del uso del pincel y del color que merece ser estudiado.   Estos son ejemplos de la mencionada engañosa sencillez de algunas acuarelas. Si, además, pintamos sobre papel de arroz, especie de esponja plana, ingobernable soporte con voluntad propia, nuestro retiro de este arte está próximo. Aunque parezcan elementales ejercicios, son obras más cercanas del final que del principio de la práctica con la acuarela, obras de un experto, no un principiante. En pintura, como en música, los silencios son decisivos y la calidad de una obra no se mide por la cantidad de notas. Es la humilde opinión de un catacaldos occidental.

Tian Yulin


Jinghua Gao Dalia






Abe Toshiyuki

Wang Young

Hsieh Ming Chang


Hsieh Ming Chang

Li Xihua

Feng Lu

Li Qing

Liu Yi


Zhao Zhiqiang


   Otras acuarelas seleccionadas de pintores en facebook. Se eligen porque muestran formas distintas de enfrentar el tema y quería incluir otras posibilidades y maneras. Casi todas se quedan en el nivel de sugerencia que me gusta; algunas algo más minuciosas y detalladas, pero sin llegar a ese momento en que se hace más alarde de paciencia que de arte.   Infinidad de acuarelas se han echado a perder por un excesivo trabajo, pues el horror al vacío, el no saber parar a tiempo es uno de los principales defectos no en la acuarela, sino en cualquier obra. La medida justa, el  nivel de acercamiento a la realidad, la tensión entre síntesis y realismo, entre detalle y sugerencia, no creo poder expresarlo mejor que W.L. Judson, en su obra "The building of a picture", Sanderson Publishing Company. Los Angeles & San Francisco, 1902:   Traduzco: "Cuando una pintura es trabajada hasta sus últimos detalles, su historia está definitivamente contada hasta la última palabra. Su encanto pronto se agota, porque no tiene nada más que dedir. Ofende el amor propio, como el narrador que insiste en explicar sus chistes".   Esta recomendable obra, puede descargarse íntegra en este enlace desde la Biblioteca de la Universidad de Los Ángeles.

Susan Crouch


Christian Graniou

Stan Miller

Ivars Jansons

Judy Greenberg

Piet Lap

Художник Namtaeksu

Вячеслав Коробейников

Жао Жичанг

Añado posteriormente un enlace a un vídeo de Geoffrey Wynne con un paso a paso de una magnífica acuarela:

Enlaces a las páginas de los pintores de esta entrada: