Sea como fuere, la autofoto o selfie levanta pasiones y copa las imágenes amateurs subidas a los medios sociales. Ya no se lleva pedir a algún pasante que nos haga la foto; brazo estirado, pose y móvil en alto. Cada uno puede inmortalizarse tantas veces como quiera y compartir su obra inmediatamente a través de su smartphone.
Sin embargo, la búsqueda del mejor encuadre puede ser peligrosa, y acarrearnos más de un susto.Tal es el caso de una joven estudiante polaca, que de visita en Sevilla y en busca de una pose impecable para su selfie, cayó desde lo alto de un puente y perdió su vida. alfonsovazquez.comciberantropólogo