Semana 39 y Nacimiento de Gabriel Antonio

Publicado el 01 junio 2012 por Concha
El tan esperado mes de mayo 2012, llegó y nos trajo muchas alegrias, sin duda lo recordaré por el resto de mi vida. Con el nacimiento de mi hijo me alejé un poco del blog, ya que el tiempo ahora se me pasa volando entre una cosa y otra, en casa con el recien nacido. Desde hace días quería aprovechar los momentos libres para sentarme a contarles sobre lo que pasó en la semana 39, pero no había podido hasta hoy o quizás deba decir que una parte de mi se reusaba a hacerlo? Por un lado digo que no había podido, porque cuando un bebé llega a nuestra vida depende 100% de nosotros, él no conoce este mundo y al principio extraña el vientre materno. Por el otro lado digo que una parte de mi se negaba a hacerlo porque siento que estoy cerrando un capítulo de mi vida que fue maravilloso (mis 9 meses de embarazo), disfruté mucho de compartir con nuestros lectores aquellas cosas que pasaron durante el embarazo y aprovecho para darle gracias a Dios porque en mi caso fue un embarazo bastante sensillo y sin complicaciones. Por otro lado oficialmente inicia un nuevo capítulo, más hermoso aún y es el de ser mamá de Gabriel Antonio Mata Amaya. Semana 39: La semana 39 transcurría normal, yo ya había decidido no salir por mi cuenta ya que mis pies estaban hinchados todo el tiempo, estabamos en estado de alerta ya que en cualquier momento podía tener señales de parto. Como ustedes recordarán en mi publicación de la semana 38 ya les contaba sobre los preparativos y todo lo que había en mi maleta. El viernes 4 de mayo, Carlos y yo, celebramos nuestros 5 años de matrimonio, por lo que ese viernes en la noche decidimos salir a cenar al restaurante peruano Segundo Muelle. La velada fue muy relajante: nosotros 2, una cena espectacular, buen vino (para Carlos y agua para mi), conversamos y regresamos a casa muy felices. El fin de semana fue normal y con sorpresa nos enteramos de que el lunes 7 de mayo sería no laborable, debido a la muerte de un ex presidente de la república (Jorge Illueca), la noticia no me agradó mucho ya que tenía planes de ir ese lunes al salón de belleza a mimarme un poco. En fin, con motivo del lunes libre, aprovechamos para traer a Lucía (la hija de Carlos) para que se divirtiera un poco envolviendo Hershey's Nuggets con un wrap especial dándole la bienvenida a Gabriel Antonio, mismos que usariamos para los recordatorios del hospital. Una buena parte de los chocolates se usaron para rellenar unas bolsitas que ella misma distribuyó a sus compañeros del salón en el sexto grado del Colegio San Agustín, ya que esos niños esparaban con ansias el nacimiento del hermanito de Lucía :-) El lunes por la tarde, recuerdo que llovía cuando salimos a llevar a Lucía a su casa y comimos un helado. El resto de la tarde, Carlos y yo, la invertimos viendo una película tranquilos en casa. Martes 8 de Mayo de 2012: El día que mi vida cambió para siempre Como ya era mi costumbre, siempre me despertaba en la madrugada y alrededor de las 4a.m. siempre tenía que hacer piss o comer un snack liviano. El martes 8 de mayo, me desperté serca de las 4:30a.m. cuando ya Carlos se alistaba para ir al gimnasio, me levanté para ir al baño y rápidamente me di cuenta que algo estaba diferente, mis pies no estaban hinchados, oriné y seguidamente rompí fuente (sorry si soy muy detallista). Por un lado fue un alivio porque uno de mis grandes temores era romper fuente y hacer un reguero en la casa, en el carro o en algún lugar público. Inmediatamente llamé a Carlos y supimos que el momento había llegado. Muy relajados nos alistamos, incluso me tomé un tiempo para arreglarme el cabello. Maleta en mano y con una tranquilidad que no se como describir, llegamos al Hospital San Fernando y a las 6:00a.m. iniciamos con los preparativos para inducir el parto, ya que no estaba dilatando. Tras permanecer todo el día en labor, fuimos al parto en la compañía de mi esposo que en todo momento me dió un apoyo que llevaré en mi corazón toda mi vida. Luego de una hora en el expulsivo tratando de realizar un parto natural, tuvimos que tomar la decisión de ir a una cesárea, ya que el  niño estaba grande y no lograba salir. Confieso que para mi fue un choque emocional, ya que estaba muy decidida a tenerlo en parto. Los preparativos para ir a la cesárea fueron tan rápidos que casi no recuerdo lo que pasó, Carlos estaba a mi lado en todo momento dándome apoyo, iniciada la cesárea creo que en menos de 15 minutos escuché por primera vez el llanto de mi hijo, de solo recordarlo mis ojos se llenan de lágrimas, fue un momento sumamente emocionante, al primer instante mis lágrimas brotaron imparables e incontroladas, es indescriptible lo que sentí, escuchar el llanto de mi hijo que era fuerte y me emocionaba escuchar por primera vez el timbre de su voz. Luego de limpiarlo y hacerle los primeros exámenes, el pediatra me lo presentó, fue muy emocionante. Gabriel Antonio, es un niño muy esperado, y cuando el pediatra y su papá lo trasladaron para practicarle sus exámenes médicos, lo esperaba su familia inmediata incluyendo a sus hermanos que no podían contener  la emoción y mis amigas muy sercanas. Fue un día agotador pero lleno de emoción para nunca olvidar. Carlos, escribió una carta muy hermosa para nuestro hijo. Confieso que no he podido leerla toda porque me emociona mucho. Es increible como brota el amor de manera instantánea, un amor inmenso y una promesa de siempre estar presenta para este hijo amado. Nota: Como les contaba en mi publicación de la Semana 25, soy fanática de los deportes y mi hijo nació en el 2012, año en el que NE Patriots fue al Super Bowl y en que el Real Madrid ganó la liga BBVA de España número 32 de su historia. También es el año Chino del Dragón, se dice que es cuando nacen personas de mucho éxito y visionarios. Saludos y gracias a todos por compartir esta inmensa alegría con nosotros!