Pero, a favor de la iniciativa un funcionario del Departamento de Estado admitió que cualquiera que viaje a la isla ``puede correr algún riesgo'', apostilla El Nuevo Herald en su práctica “periodística” de editorializar la violencia contra Cuba, con declaraciones fuera de contexto.
Alex Burgos, portavoz de Rubio dijo, que él ``cree firmemente'' en bloquear más viajes a Cuba, y que los dos legisladores cubanoamericanos tratarán de impulsar nuevamente la enmienda.
``Si la administración insiste en su incorrecta política de expandir los vuelos directos a estados que promueven el terrorismo'', dijo el vocero, ``el senador Rubio seguirá ofreciendo esta medida bipartidista para detenerla''.
Asimismo, Rubio insiste en vincular el tema de los vuelos con el proceso que se sigue a Alan P. Gross en La Habana.
No son de extrañar las declaraciones del legislador, benjamín del Tea Party y el terrorismo de Miami: "Yo apoyo el embargo, creo que nos da la oportunidad de tener una influencia sobre el futuro de ese país", había dicho en sus primeras declaraciones a la prensa tras ganar los comicios de noviembre del 2010.
"El interés que yo tengo sobre el tema de Cuba es la libertad política del pueblo cubano", reafirmó Rubio.
La tentativa de bloquear los viajes atrajo fuertes críticas de la Cámara de Comercio del Área de Tampa que envió una carta a Rubio pidiéndole retirar la enmienda, calificada de ``injusta para las empresas y los cubanoamericanos que tienen que soportar la indebida carga financiera y la incomodidad de tener que viajar a través de Miami''.