A continuación te mostramos una lista de evidentes señales de que una relación va mal. Las relaciones tienen muchas etapas y con el tiempo todas superan crisis más o menos graves, por lo que no es definitivo cumplir o haber cumplido en el pasado algunas de estas malas señales. Pero si se te acumulan, quizás es momento de replantearse las cosas, juntos o por separado, pero con el fin de buscar lo mejor para ambos.
Las continuas discusiones son una de las señales de que una relación no va bien. Fuente de la imagen: magnoliahotelsalou.com
Te molesta casi todo lo que hace o te da igual todo
O al menos así lo verbalizas. Su presencia te hace sentir mal, prefieres que ni esté o se vaya un rato para no tener que verle. Todo o casi todo lo que hace te molesta: su manera de hablar, de vestir, de comer, de sentarse, de reírse. Te pasas el día quejándote, diciéndole todo lo que tiene que cambiar, pensando cómo te gustaría que fuera, o bien te callas y no lo dices, “pasas”, pero lo piensas.
En ocasiones piensas que solo estarías mucho mejor. Piensas en acabar con la relación o incluso es posible que ya se haya acabado en anteriores ocasiones varias veces.
No te imaginas con esa persona en el futuro. De hecho ya no habláis de planes futuros, no existe la ilusión ni las ganas de planificar nada. No existe un compromiso a medio o largo plazo.
Ya no mantenéis relaciones sexuales como antes. Es posible que algún miembro de la pareja desee más relación íntima que el otro, lo que puede generar conflictos. O es posible que no se mantengan relaciones y se enfríe la situación.
Ya no disfrutáis juntos, no hacéis cosas juntos, discutís por todo o apenas habláis. Sientes que todo es discutir, que todo es una batalla y que ‘siempre’ es lo mismo o ‘siempre’ estáis igual. Este suele ser uno de los signos más representativo de que la cosa no va bien entre vosotros.
Todo lo que antes disfrutabais y os unía, ahora no te apetece. Prefieres hacer las cosas solo que acompañado de esa persona que es tu pareja.
Sientes que siempre tienes la culpa de todo, que el otro no hace nada mal y no reconoce sus errores. Esto es una señal de que algo no funciona porque todos nos equivocamos y las relaciones de pareja son cosa de dos. O por el contrario piensas que es el otro que ‘siempre la caga y lo hace todo mal’. Algo falla, algo no funciona bien. La humildad y el reconocimiento de errores es el primer paso para llevarse bien en una relación y seguro que las dos personas pueden contribuir a mejorar.
Prefieres disfrutar, hablar, compartir cosas con los demás, que con tu pareja. Sales más con amigos, conocidos, familia, etc. Y te sientes mejor ahí. ¡Ojo! En algunas relaciones las infidelidades empiezan a aparecer de esta manera.
Ya no os contáis las cosas como antes (si es que lo hacíais), e incluso no te apetece o no sientes que le interese. Ya no le cuentas tus cosas íntimas o incluso del día a día. Cómo te ha ido el día, qué has hecho, cómo lo has pasado, qué has pensado hacer, si te has acordado de él o ella, etc.
Uno siempre tiene que hacer lo que el otro o la otra diga para que no se enfade (complaciente) y el otro cree que hay que hacer lo que él o ella diga porque se puede enfadar. No existe ni comunicación, ni entendimiento, ni negociación, ni igualdad. Todas las parejas, todas, disponen de dos partes. Una que es íntima y personal en la que realiza cosas suyas propias que no comparte con su pareja, y otra parte en común que deben siempre compartir. Si no tienes libertad para disponer de tu tiempo, algo no funciona, al igual que si todo el tiempo que pasas, es siempre con tu pareja, eso tampoco es una buena señal.
Empiezan a comentarte que qué pasa, si os ocurre algo, que si ya no salís, ya no vais, no os ven juntos, discutís delante de otros, tenéis mala cara…
¿Te has sentido identificado o identificada con estas señales de que una relación va mal? Piensa que si es así, lo mejor es actuar. Hablar con tu pareja, tomar decisiones, tratar de ir hacia delante o hacia atrás, buscar la ayuda de un profesional… En nuestra consulta de psicología tratamos a menudo parejas y te podemos asegurar que son muchos los que llegan demasiado tarde para salvar la relación, así que si la cosa se está torciendo, ¡actúa!
Sobre el autor
Yolanda
Yolanda Pérez Directora del centro de Psicología Eclipse Soluciones. Doctora en Psicología (nº col. CV-9418) y Master en Psicología de la Salud. Especializada en terapa adultos-intantil. Experta en formación y orientación laboral.
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