La ruta de la Cascada del Chorro es una preciosa ruta por el Valle de las Batuecas, en La Alberca, la mayor parte es en paralelo al río Batuecas.
Comienza en el Monasterio de San José fundado a finales del s. XVI y que aún hoy está habitado por carmelitas descalzos es uno de los pocos monasterios eremíticos que aún perduran en todo el mundo. Estos monjes tienen voto de "Ora et labora", no admitiendo visitas turísticas en el recinto debido a su actividad monacal y retiro espiritual permanente.
Al comienzo el sendero es bastante sencillo, y tras una caminata se llega al primer desvío, que señala la primera de las tres zonas de pinturas rupestres. Después un ascenso complicado para gente bajita porque tiene "escalones" muy altos se pueden observar unas impresionantes vistas del valle y las pinturas rupestres del "Canchal de las Cabras Pintadas", una cueva natural que alberga varias pinturas rupestres del Neolítico, de hace unos 7000 años, estas pinturas se caracterizan por su marcado contenido simbólico.
Siguiendo el sendero, cada vez más complicado porque deja de exisitir como tal y pasa a ser una caminata entre rocas, nos encontramos con las siguientes pinturas rupestres camino de la Cascada del Chorro son las del Canchal del Zarzalón.
Las últimas pinturas rupestres, el Canchal de la Umbría del Cristo, se encuentran a unas dos horas y media del inicio de la ruta, tras pasar el arroyo, a éstas yo no pude llegar porque nos entretuvimos demasiado y se nos fue haciendo tarde y al cruzar el río nadé un poco por esas frías aguas y tuvimos que emprender el camino de vuelta.
Fue un día muy divertido, en plena naturaleza y conociendo un poco de historia.
Ana Díaz